La COPARMEX Metropolitana urgió la desaparición de las Juntas de Conciliación y Arbitraje, porque la corrupción es un mal que aqueja a este modelo tripartita desde hace muchos años, “pues para todos es sabido que el personal está coludido con los sindicatos”, afirmó Miguel Angel Andrade García Alonso, presidente de la Comisión Jurídico Laboral de la Confederación Patronal de la República Mexicana.

Entrevistado dijo que éste es un cáncer inserto en las Juntas de Conciliación y Arbitraje, por eso se pretende que no quede el mismo personal en los Tribunales Laborales que se integrarán, porque sería como trasladar el mismo mal a este nuevo modelo de justicia laboral.

Andrade García Alonso opinó que sería recomendable que se llevara personal de estos órganos laborales, “pero insistió que no fuera a todos, porque sería tanto como trasladar el mal que ha caracterizado a las Juntas de Conciliación y Arbitraje”.

Justicia laboral

Lo que se pretende aquí es rescatar a los que valgan la pena por su experiencia, pero no a todos, pues si es el mismo personal sólo cambiaríamos la justicia de casa y la corrupción no se solucionaría.

Comentó que desde su punto de vista la “justicia laboral no está funcionando, porque se tiene mayor demanda de juicios”.

La COPARMEX está a favor de que desaparezcan las Juntas de Conciliación y Arbitraje  y trasladarlas al poder judicial, “siempre y cuando haya reglas claras para la transición de los juicios que actualmente se encuentran en las juntas”.

Puede ser de utilidad el trasladarlo a un nuevo poder, pues las Juntas de Conciliación aunque tienen una función administrativa, tienen funciones jurisdiccionales, eso quiere decir que resuelve juicios pero no son parte del poder judicial, sino ejecutivo.

Falta presupuesto

Destacó que  actualmente no están funcionando las Juntas de Conciliación y arbitraje por falta de presupuesto y si ese mismo presupuesto se piensa dejar para los tribunales, será la crónica de un nuevo fracaso.

Las Juntas de Conciliación y Arbitraje parecen sólo tribunales de casación, es decir, únicamente tienen a las partes enfrente y tratan de llegar a una conciliación y si no se llega, el juicio se litiga, o sea, el que tiene la última palabra en un juicio laboral, no son las Juntas de Conciliación y Arbitraje, sino los tribunales Colegiados de Circuito, que son dependientes del poder judicial.

Es decir, lo que se trata de hacer es quitar ese filtro de las juntas que  al final hoy está sucediendo, el que tiene la última palabra es el poder judicial.

Sin huelgas

Hoy se habla mucho de la paz laboral y en la Junta Federal se tienen más de 37 meses o poco más, sin estallamiento a huelga. En el Distrito Federal sí se tienen estallamientos de huelga y en el Estado de México, no. Esa paz tiene un costo importante para los trabajadores, porque se están tapando los derechos de los trabajadores, pues quieren mandar una señal a nivel internacional de que no se tienen conflictos laborales, pero sí existen, pero se resuelven a través de la conciliación y lo que hay que cuidar que no se resuelvan con  temas políticos y con un manotazo en un escritorio y el sindicato no pueda continuar con su procedimiento.