Las panaderías tienen cada vez menor rentabilidad en los negocios por el aumento de insumos; y mantener los precios los lleva a cerrar establecimientos, más aún ante la incertidumbre en 2018; aunado a la caída entre 4 y 5 por ciento en el consumo, afirmó Borja Esteban Martínez, director de la Cámara Nacional de la Industria Panadera (Canainpa).
Reconoció que el consumo del pan no es tan importante como en otros países y la baja en las compras, repercute en que sigan o no los negocios y se está hablando del cierre de fuente de empleos, “como supongo está sucediendo en varios estados, apenas el miércoles pasado cerró una panadería en la capital del país”, expresó.
Dijo que desde la cámara se tiene la costumbre de no hablar de precios, el industrial tiene total libertad y autonomía para marcar los de su producto.
Borja Esteban Martínez afirmó que “lo que sí puedo decir es que que en el mismo sentido que el maíz, nuestros industriales han venido sufriendo el incremento de insumos y le pega cualquier tipo de cambio frente al dólar”.
“El panadero es muy libre de aguantar todo lo que considere, nuestros industriales llevan aguantando los precios y asumiendo estos costos muchos años. Pero sí entendemos que cada vez hay menor rentabilidad en los negocios, porque el aumento de precios y mantenimiento nos lleva a esa situación de incertidumbre”.
Se tiene claro que el industrial panadero lleva muchos años asumiendo un costo y mantenimiento del precio, para que no repercutirlo en el costo del producto al público; “pero todo tiene un límite y en cada uno de los industriales el límite es diferente, pero cada empresario hará lo que sea posible para la subsistencia de su negocios. Tenemos más de mil socios, entre ellos la empresa Bimbo y hasta pequeñas panaderías; el espectro es muy amplio”.
De 2012 a 2016 el consumo se incrementó 1.03 y 1.04 por ciento cada año, hubo crecimiento estable; pero en 2017, estimamos una caída de 3.2 al 3.8 por ciento.  Con lo cual con respecto al 2016 habremos perdido entre 4 y 5 por ciento.
Y detalló que el mexicano no se distingue por un consumo del pan elevado, pues 33 kilos y medio de pan al año; hay países como chile, Alemania o Turquía, donde el consumo es 104, 100 o 108 respectivamente.
“Nosotros estamos poniendo todo lo que está de nuestra parte para mantener el consumo, manteniendo tradiciones como la elaboración de pan de muerto, la rosca de reyes”.