A 39 días de actividades, la abanderada de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Delfina Gómez, ha tenido momentos sensibles, pero en Atizapán de Zaragoza hubo uno en especial que hizo que su voz se quebrara y sus ojos se cristalizaran.
Fue cuando un señor con manos curtidas por la mezcla de cemento, arena, cal y agua, la saludó. Esas manos maltratadas, evocaron la imagen de su padre Delfino, quien murió por enfisema pulmonar por inhalar el polvo de material de construcción.
Hizo hincapié en su programa RITMO, con el cual pretende resolver la problemática de movilidad en Estado de México (edomex).
Aseguró a empresarios que todas las inversiones serán bienvenidas, bajo la premisa de mejorar la calidad de vida de los mexiquenses, porque reactivan zonas abandonadas   y cumplir con la normatividad urbana.
Gómez Álvarez se alegró por la reunión: “Anteriormente se tenía la idea que los únicos que podían aspirar a tener cierta relación con ellos, era el PRI, pues yo celebro mucho porque tanto los industriales como los sindicatos ven otras posibilidades y eso nos ayuda mucho”.
La legisladora federal con licencia recordó que el arquitecto Salvador Daniel Kabbaz, presidente de la ADI –integrada por 76 empresas líderes de México–, le presentó los alcances de la industria inmobiliaria en el Edomex, donde invierten casi cinco mil millones de dólares anuales.
Las empresas de la ADI están especializadas en la construcción de hospitales, vivienda media y residencial, hoteles, oficinas, parques industriales, centros comerciales y desarrollos turísticos.
Al término de su mitin, se le cuestionó a la abanderada de Morena respecto de las afirmaciones sobre que “sí va” el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México aunque ella gane ella la elección, a lo cual admitió que tiene limitaciones, y será el presidente de la República quien lo decida.