El presidente municipal de Toluca, Raymundo Martínez Carbajal, propuso trabajar en una reforma a fin de adecuar las tareas de los integrantes del Cabildo a funciones ejecutivas y que se estudie la posibilidad de establecer perfiles especializados para ocupar cargos de síndicos y regidores.
Después de referir que los Cabildos son una expresión democrática vasta que tienen, como toda figura democrática, áreas de oportunidad y aspectos que podrían mejorarse, el alcalde explicó que está convencido de que la función municipal tiene que revisarse con base en las experiencias adquiridas al intentar articular una estrategia lo más práctica posible e iniciar con elementos materializados.
Otra opción sería plantear una reforma del Estado, lo que significaría entrar a un nivel de discusión de otra índole, por ello, dijo que los ejercicios entre ciudades capitales o zonas metropolitanas tienen sentido y, sobre todo, que se logre visibilizar esta situación.
Uno de los puntos que debe considerarse para este rediseño municipal es la visión de largo plazo, porque con ello existirán esquemas que permitirían a la administración municipal garantizar que el trabajo de los alcaldes esté sujeto a entregar haciendas sanas, con programas preestablecidos, que permitan a los presidentes municipales sólo llevar el trabajo de conducción de los programas y acciones, y no reinventar la administración pública municipal cada tres años.
“El problema real al que está sometida la administración municipal es el corto plazo, es decir, se inicia el primer año de gobierno con peripecias por cómo dejaron la administración y se tiene suerte si en un lapso de cuatro meses empiezas a trabajar, de lo contrario se pierde un año, que bien puede ganarse si existieran esquemas que garanticen continuidad”, explicó.
En este sentido, Martínez Carbajal, enfatizó que esa reforma debe contemplar que los Cabildos tengan ciertas funciones ejecutivas que, en determinado momento, planteen perfiles especializados de quienes ocupan esos cargos, ya que hoy sólo son representación de la composición demográfica y no de los perfiles técnicos que podría generar esa población.
Lo anterior implicaría un ahorro en el pago de las nóminas, ya que si el regidor es, al mismo tiempo, responsable de una Comisión y titular de una dirección, la dinámica sería distinta y el perfil de ese funcionario tendría una lógica diferente.
“Me iría a una revisión integral, no sólo tomar esta propuesta para eliminar adversarios. La iniciativa va encaminada para hacer que los Cabildos sean el cuerpo colegiado que facilite la generación de bienestar en los municipios, este es el gran reto”.
Finalmente, el primer edil toluqueño añadió que es en los municipios donde confluyen dos tipos de funciones: la ejecutiva y legislativa que se nota claramente en las sesiones de Cabildo, permitiendo que el alcalde y los ediles estén en una dinámica constante que enriquece la democracia, que en el caso de Toluca se basa en la presencia de los partidos políticos y podría, sin duda, mejorarse.
