La Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM) desplegó un estado de fuerza de más de 200 elementos para que resguarden la integridad física de los feligreses que participan en la LXXX Peregrinación Anual de Toluca al Tepeyac, que se desarrolla desde hoy, lunes 19 hasta, el jueves 22 de febrero.
Derivado del paulatino arribo de creyentes al primer cuadro de esta ciudad, el operativo se aplicó de manera preventiva desde ayer domingo en los portales del centro de la ciudad, el Mercado Juárez, la Plaza España, así como en áreas aledañas.
En las calles de Sebastián Lerdo de Tejada, Nicolás Bravo, Santos Degollado, Juárez Norte, Gómez Pedraza y Nemesio Diez, entre otras, se puso en marcha también un operativo de vialidad para estacionar, debidamente, las más de 100 camionetas 50 camiones Torton, 20 autobuses y tres tráileres, en los que se transportaron gran parte de los penitentes, que asistieron a la Misa del Buen Viaje, realizada a las 06:00 horas de este lunes.
Marcharán más de 70 mil antorchistas
Al término la eucaristía, 07:15 horas, los feligreses iniciaron su peregrinar hacia la Basílica de Guadalupe, en la ciudad de México, circulando por la calle de Nicolás Bravo para salir a la avenida Morelos; de ahí caminaron por el carril de extrema derecha y proseguirán por Paseo Tollocan y la Carretera Toluca-México, con destino al poblado de Ocoyoacac, lugar al que arribarán a las 12:30 horas, aproximadamente.
Con base en los datos aportados por la Comisión Diocesana para las Comunicaciones Sociales, de la Diócesis de Toluca.
El martes 20 iniciarán su recorrido a las 02:00 horas rumbo al Valle del Columpio, en la Marquesa, donde a las 07:00 horas se celebrará la eucaristía y reanudarán su andar, partiendo a las 08:45 con dirección a Cuajimalpa.
La tercera y última parte de la peregrinación anual será el mismo martes 20, desde la Parroquia de San Pedro Cuajimalpa, a partir de las 20:15 de la noche, para arribar a la Basílica de Guadalupe alrededor de las 4:00 am.
El Gobierno del Estado de México garantizará en todo momento el tránsito de los peregrinos hacia el Templo Mariano de la Ciudad de México, y debido a las dimensiones de esta manifestación de fe, adoptará las medidas necesarias para evitar contratiempos a penitentes y ciudadanos.