La diputada Yomali Mondragón exhortó a los distintos niveles de gobierno, a reorientar los programas sociales y a elaborar programas emergentes para apoyar a la población más desprotegida económicamente, ya que luego del aumento a los insumos energéticos, los precios de diversos productos se elevaron considerablemente, sobre todo, ahora ante el panorama nacional e internacional que se avecina.
Explicó que luego del incremento de los precios de los alimentos, México, se ubicó en el nada honroso segundo lugar, entre los 35 países de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), que registraron la inflación más alta al respecto durante septiembre.
Aumentos
Incluso refiere que los precios de los alimentos entre los integrantes de la OCDE se redujeron 0.4 por ciento, pero en México subieron 4.8 por ciento, siendo superado sólo por Corea, donde aumentaron 5.6%.
Basta señalar los recientes gasolinazos y aumento de tarifas de energía eléctrica de entre 5.6 por ciento y 7.2 por ciento para el sector industrial; de un 3.3 por ciento para el uso doméstico de alto consumo (DAC) y de entre 3.3 por ciento y cinco por ciento para el sector comercial.
Descontento
Las alzas en estos insumos repercute en los alimentos y de ello dan cuenta las personas de a pie, las amas de casa o el trabajador asalariado, quienes resienten en sus bolsillos estas alzas, pues son el último eslabón en esta cadena de aumento de precios, agregó la legisladora Yomali Mondragón.
No sería nada raro que comenzaran a surgir brotes de descontento social, sobre todo porque el gobierno federal había argumentado una serie de beneficios tras las reformas energéticas.