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Se reactiva la sede Toluca del PJF; muestran rechazo por reforma judicial

Integrantes del Poder Judicial de la Federación, en su sede en Toluca, ondearon una bandera monumental al retomar actividades 

Los trabajadores esperan tardar dos semanas en ponerse al corriente.


Después de dos meses de paro laboral, los trabajadores del Poder Judicial de la Federación en Toluca retomaron sus actividades, aunque enfrentan un rezago de 40 por ciento en los expedientes.

La reactivación de las oficialías de partes y tribunales, destacaron los jueves y magistrados, no significa que estén conformes con la implementación de la reforma judicial.

Por el contrario, aseguraron que trabajarán, sí, pero con la expresa protesta.

En un gesto simbólico, los trabajadores ondearon una bandera monumental en la sede del Poder Judicial de la Federación en Toluca para demostrar su continuo rechazo a la reforma y que para ellos representa la transgresión de la división de Poderes en los que está basada la República Mexicana.

Los jueces calificaron a la reforma como “retrógrada”

Los jueces enfatizaron que su regreso al trabajo no implica aceptación a las injusticias.

Mientras que los magistrados destacaron que la reforma no combate la impunidad ni la corrupción, por el contrario, podría significar un Poder Judicial servil a quien esté en el Ejecutivo.

Respecto a la reanudación de labores, Víctor Flores Nicolás, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores del Poder Judicial de la Federación con sede en Toluca, resaltó la unión entre la base trabajadora y los titulares durante el paro.

También mencionó que confían en que la Suprema Corte detenga la reforma y preserve la carrera judicial.

En ese sentido, reconoció que existe un rezago de 40% en los expedientes lo que representa un desafío significativo para el Poder Judicial de la Federación.

Ante ello, dijo, los trabajadores esperan tardar dos semanas en ponerse al corriente.

Finalmente, los trabajadores destacaron que la Suprema Corte de Justicia de la Nación tiene ahora la tarea de tomar una decisión que podría ser un hito en la historia, por lo que confían en que los magistrados podrán detener la implementación de la reforma y con ello salvaguardar al Poder Judicial.