Durante los primeros seis meses del presente año, los empleos formales han mostrado signos de recuperación en el Estado de México; sin embargo, no se han logrado los que se tenían a mayo de 2020.

El análisis realizado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), considerando cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), muestran que febrero y mayo han sido los meses en donde mayor recuperación de puestos laborales se ha tenido, indicando que de manera general, en el primer semestre del año se ha registrado la recuperación de casi 30 mil empleos.

Respecto a la variación mensual en el empleo formal a nivel estatal, se detalla que de abril a diciembre de 2020 se perdieron 85 mil 873 empleos, siendo los meses de abril y diciembre más críticos, registrando una pérdida de casi 37 mil y 26 mil empleos, respectivamente.  

Para 2021, se indica que se han recuperado 29 mil 363 y de manera detallada que: en el mes de enero se rescataron 844 empleos; en febrero 9 mil 597; marzo 3 mil 028, abril 6 mil 814; mayo 7 mil 231 y junio 1 mil 849.  

En su estudio denominado “Diagnóstico de los cambios en el mercado laboral en tiempos Covid-19”, refleja que el Estado de México ha perdido 1% de los empleos formales que tenía en febrero de 2020 y aunque ha mostrado índices de recuperación, aún no logra estabilizarse. La cifra a febrero de 2020 era de 1 millón 638 mil 840 y para el mes de junio 2021 registra 1 millón 622 mil 778.  

En el apartado de variación en la población ocupada a nivel estatal respecto al primer trimestre de 2020, muestra que la población ocupada fue de 7.2 millones de personas, mientras que en el primer trimestre del presente año, se registró un total de 6.7 millones, teniendo una variación de -4.9%, siendo la sexta entidad con más pérdida.  

De manera general, el IMCO refiere que en abril de 2020 más de la mitad de la población dispuesta a emplearse, se quedó sin acceso a una fuente de ingreso suficiente; en términos relativos, los más afectados por la pérdida de empleo en abril de 2020 fueron los trabajadores que declararon no recibir pago y los independientes; a la par, los sectores que registraron las mayores reducciones del empleo fueron la construcción y el comercio, con caídas de 39% y 34% de la población ocupada, respectivamente.