A pesar de haberse comprometido en septiembre de 2017 a mejorar el servicio a cambio del incremento al pasaje, ayer, en un intento de politizar el tema y a manera de chantaje, los transportistas mexiquenses repelaron nuevamente contra la gaceta del 20 de marzo, apoyados en el partido político Vía Radical.
Líderes de más de 20 organizaciones del transporte que trabajan en rutas de Tlalnepantla, Coacalco, Ecatepec y Jilotzingo, acompañados de representantes de dicho instituto político, reiteraron su planteamiento de detener las mejoras que pretende el gobierno estatal, pues a su parecer no traerán beneficios para la seguridad de los usuarios.
Olvidaron mencionar, que estas medidas obedecen a los términos de un acuerdo que ya habían aceptado, a cambio de un beneficio para ellos hace solo ocho meses atrás.
En un intento de alianza con el partido y deslumbrados por las promesas de un supuesto apoyo a su sector en caso de que sus miembros lleguen a un curul en la Legislatura local, los transportistas adoptaron una posición desafiante en contra del gobierno, pronunciándose por un freno total a las reformas de la gaceta, presumiendo que este próximo viernes buscarán directamente al gobernador Alfredo del Mazo para exponerle todas sus problemáticas en la materia.
En este sentido, al hacer uso de la palabra, el presidente de Autotransportes Integrales del Estado de México S. A. de C. V. Ruta 26, Jorge Espinosa Nolasco, detalló que solicitarán a la autoridad apoyos para poder realizar la tramitología y recursos ya sean de la banca internacional o del gobierno federal para comprar unidades nuevas y hacer la instalación de los sistemas de seguridad; pese a que el aumento a las tarifas autorizado el año pasado se concedió en raíz de poder solucionar estos temas.
Declaró que al menos sus agremiados, no están en contra de la gaceta solo por pedir un aumento de tarifa más, y lo único que piden es que estas innovaciones de seguridad no traigan consigo una disminución de sus ingresos de manera considerable, especialmente por la inversión que tienen que realizar.
De manera general, explicó que el rechazo de los transportistas radica en que se considera que la instalación de los aditamentos para proteger al pasaje, no ayudará porque aun así se registrarán asaltos, además de que en cualquier incidente delictivo, serán ellos quienes llevarán toda la responsabilidad