Una sociedad cada vez más consciente del cuidado de la salud ha impulsado la proliferación de bebidas de origen natural como nuevo modelo de negocio en el país.
Al cierre de 2017, el valor de mercado de las bebidas procedentes de plantas como coco, raíces, plantas, vegetales, así como de algunos cactus, alcanzó los 2 mil millones de dólares, de acuerdo con la consultora en investigación de mercados Euromonitor International.
La tendencia específica de la preocupación hacia la salud por parte de los consumidores es el principal motor para una industria que innova tanto en productos como en estrategias de campaña.
Entre las bebidas saludables que se han convertido en tendencia, la de coco es la que tiene una mayor penetración en el gusto de los mexicanos.
Al cierre de 2016, México produjo 221 mil toneladas de coco, un alza de 5.6 por ciento que equivale a un volumen adicional de 11 mil 803 toneladas, de acuerdo Sagarpa.
Otra de las innovaciones mexicanas es la bebida a base de tuna, la cual fue creada por tres emprendedores mexicanos que quisieron aprovechar la popularidad de las también llamadas superfood (alimentos que contienen una densidad alta de nutrieres en una porción pequeña).
De acuerdo con la embotelladora sueca Tetra Pak, quien envasa este tipo de bebidas, el principal consumidor de los nuevos líquidos son los millennials.
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