En México hay 8.5 millones de personas que padecen asma, lo que significa siete por ciento de la población, de los cuales la mayor parte se trata de infantes, recién nacidos y de hasta 14 años de edad, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En el marco del Día Mundial del Asma, que se conmemora el 2 de mayo, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) refirió que en 2015 atendió más de 260 mil casos por crisis asmática y que cuenta con diversas opciones para tratar el padecimiento.
Al dar referencia sobre la atención que brinda a sus derechohabientes con enfoque preventivo y con la promoción de hábitos saludables, refirió que a pesar de que no es un padecimiento curable, puede ser controlable en su totalidad.
Para ello existen diversas recomendaciones como cumplir con el esquema de vacunación completo, recibir la inmunización contra la influenza, realizar ejercicio físico regular, pero evitarlo al aire libre cuando exista mal clima o alto grado de contaminación.
Además, tener una alimentación adecuada y bajar de peso en casos de obesidad, reducir exposición a contaminantes dentro del domicilio, incluyendo aromatizantes y olores fuertes como bálsamos e inciensos y evitar la exposición a alérgenos como polvos caseros, humedad, polen, pelo de gato, entre otros.
El IMSS recordó en un comunicado que también existe un tipo de asma que no tiene origen alérgico, sino que reacciona al humo de tabaco, por la exposición a solventes o humo de leña, por lo que es importante evitarlos.
Advirtió que el desconocimiento de la enfermedad o un mal control, provoca crisis asmática y requiere de atención en áreas de urgencias, pues la dificultad para respirar llega a poner en peligro la vida.
En el caso de asma alérgica, explicó que cuenta con vacunas personalizadas que se elaboran para tratar las sustancias a las que el paciente resulte alérgico, cuyo objetivo de aplicarlas es que los signos de alergia -estornudo, escurrimiento nasal, comezón o tos- se presenten con menos intensidad; además de que también hay tratamientos inhalados para su control.
En el caso de pacientes con asma grave que no responden a tratamientos inhalados o vacunas, los medicamentos biológicos son de gran eficacia.
Los procedimientos invasivos a nivel local de bronquios están indicados en pacientes con asma grave entre 18 y 65 años de edad con mal control de la enfermedad, a pesar de llevar tratamiento como lo indica el especialista.