El crecimiento del padrón de afiliados del Partido Nueva Alianza (Panal) entre 2014 y 2017 fue de 208 mil 647 adeptos, lo que representa un aumento del orden de 46.44 por ciento en ese periodo; sin embargo, la evolución no ha estado exenta de dificultades, toda vez que en los dos procesos de verificación a los padrones partidistas que realiza el Instituto Nacional Electoral (INE) le ha “rasurado” 30 por ciento de sus simpatizantes en cada ocasión.
Por inconsistencias en los registros de sus afiliados, cuyos conceptos destacan la duplicación de nombres en el mismo padrón, o en dos o más partidos, personas registradas que fallecieron o se dieron de baja voluntariamente, en la auditoría del 2014, al Panal se le quitaron 189 mil 957 militantes, en tanto, para la de 2017 ascendieron a 269 mil 244 las personas que no le fueron reconocidas como parte de sus filas.
En suma, al partido turquesa le eliminaron 459 mil 201 simpatizantes, y aun así, registró cifras en números positivos con ganancias de 208 mil 647 afiliados, para totalizar este año 657 mil 864 registros validados por el INE, lo que representa 0.75 por ciento del padrón electoral federal.
Sin incluir a los partidos de la Revolución Democrática (PRD) y Revolucionario Institucional (PRI), cuyos crecimientos fueron 2.6 y 1.3 millones de afiliados, respectivamente, el Panal ocupa el primer sitio en relación con los registros válidos obtenidos en 2017 en comparación con el proceso de verificación que la autoridad electoral realizó en 2014.
Al llamado partido turquesa se le dio el registro como partido político nacional en 2005, luego de que cumplió con toda la tramitología que impone la autoridad electoral para obtener el título, que establece entre los requisitos tener un registro de militantes que rebase 0.26 por ciento del padrón electoral federal empleado en la elección federal ordinaria anterior al proceso de revisión.
En aquel año, Panal informó tener 224 mil 728 simpatizantes con los que participó en la elección federal de 2006 con candidato presidencial propio, cuya responsabilidad recayó en Roberto Campa Cifrián; sin embargo, el proceso de afiliación se fue a la baja de manera paulatina y sistemática, hasta llegar a 2011 con 199 mil 673 adeptos; es decir, un poco más de 25 mil simpatizantes abandonaron el barco turquesa en ese periodo.
Con ese marco previo a las elecciones presidenciales de 2012, Gabriel Quadri se presentó ante el electorado con un partido mermado por la baja en sus simpatizantes. Vinculado desde sus inicios al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y a su lideresa Elba Esther Gordillo, los turquesas obtuvieron algunas curules y escaños no sólo en las cámaras federales sino en varias locales, sin embargo, su padrón se encontraba estancado.
Hasta 2013, en el que de acuerdo con los registros de Panal sus adeptos llegaron a 480 mil 581 al cierre de ese año, la llegada de 280 mil 908 nuevos simpatizantes coincidió con la captura de Elba Esther Gordillo en febrero de 2013.
La ley obliga a los partidos a subir al sistema del INE el padrón de afiliados para que el organismo electoral lo verifique y audite, a la vez que realice los cotejos correspondientes con los padrones de otros partidos con el fin de evitar inconsistencias.
En marzo de 2017, subió al sistema de la autoridad electoral un padrón que se acercaba al millón de afiliados; sin embargo, de los 927 mil 108 registrados por el partido turquesa, 269 mil 244 fueron rasurados para totalizar 657 mil 864 registros validados por el organismo electoral; con esta cifra récord en su militancia, el Panal encara por tercera ocasión las urnas en 2018 con candidato presidencial propio, según ha dicho su líder nacional Luis Castro Obregón.