En los últimos cuatro años el Partido Revolucionario Institucional en la Ciudad de México ha acumulado multas cada vez más elevadas impuestas por el Instituto Electoral capitalino, incluso el propio partido reconoce que pasó de no tener ningún tipo de castigo en 2013, a enfrentar sanciones elevadas en 2016.
Sin embargo, la información del tricolor no coincide con los datos aportados por el organismo electoral, que refiere sanciones más altas, incluidas algunas en el periodo de Mariana Moguel, actual presidenta del tricolor en la capital del país.
Mediante una solicitud de información hecha al PRI, éste organismo refirió que en 2013 no tuvo multas, pero para el siguiente año reconoce que se le impuso una cantidad de 418 mil pesos y la suma se duplicó para el 2015, con 823 mil 554 pesos. Y apenas el año pasado la sanción a la cual debió hacer frente fue por un millón 966 mil 18 pesos.
Interrogada acerca de las sanciones en su calidad de dirigente, Mariana Moguel reconoció que la anterior administración, encabezada en ese entonces por Cuautémoc Gutierrez de la Torre, no cumplió.
“Cuando tú no ejecutas ese presupuesto ahí donde lo debes de ejecutar, entonces la multa es hasta por 200 por ciento, y efectivamente, en la administración pasada no se aceptó un presupuesto en temas de mujeres y eso recae en mi actual administración por esa situación”, refirió Moguel.
La solicitud sobre las multas que impuso la autoridad electoral al PRI año con año llega hasta el 2016, pero la dirigente partidista acotó que esos montos vienen de las sanciones hechas en 2015, por lo tanto ninguna corresponde a su gestión, ya que ella tomó las riendas del partido en diciembre de ese año.
Integrantes del PRI local, como Dunia Ludlow y José Encarnación Alfaro, salieron en defensa de su dirigente y argumentaron que el mal estado y las amonestaciones que enfrenta el partido también son responsabilidad del PRI nacional, pues se ha desentendido de su representación en la ciudad, sin entender la importancia de posicionarlo, a pesar de que “la capital es una caja de resonancia para todo el país”, aseguró Ludlow.
José Encarnación Alfaro, quien fue secretario de Organización del Comité Ejecutivo Nacional tricolor hasta el 2015, consideró que cualquier tema relacionado con las multas aplicadas al partido pasa necesariamente por la dirigencia nacional, pues consideró que Moguel se ha esforzado por encauzar a un partido desprestigiado.
“Donde exista un problema de esa naturaleza es responsabilidad de la dirigencia nacional intervenir, acotar y resolver, si hay un problema en materia de manejo de recursos, eso nos impacta como partido nacional”, afirmó Alfaro.
En la solicitud de información realizada por CAPITALMEDIA el partido omitió detallar qué motivos ocasionaron los castigos, por ello, se solicitó la misma información al instituto capitalino, que ofreció los detalles de las acciones que realizó el PRI y que constituyen violaciones electorales por las cuales se les aplicaron distintos montos de multa.
Es de señalar que las causas violatorias se refieren a años todavía más atrás del requerimiento de información –2010 a 2012–, pero las sanciones sí se aplicaron en el periodo de 2013 a 2016 que fue solicitado.
En 2013 el organismo electoral de la Ciudad de México refirió que el partido no destinó durante el ejercicio 2011 los porcentajes mínimos de tres y dos por ciento para el fortalecimiento de los liderazgos femeninos y juveniles, respectivamente, por tal motivo lo multó con 137 mil 693 pesos, pero en ese mismo año el instituto político refiere que no hubo ningún tipo de sanciones.
El 2014 fue el año en que tuvo un mayor número de multas, principalmente por rebase de tope en gastos de campaña en candidaturas delegacionales, entre otras sanciones, que dan un total de un millón 898 mil 799 pesos.
Para el año 2015, al PRI en la Ciudad de México se le hizo una multa por 2 millones 634 mil 872 pesos. Este medio solicitó un posicionamiento a la vocería nacional, quien pidió las preguntas a realizar de manera previa, las cuales fueron enviadas desde el lunes 3 de julio, pero al cierre de esta edición no habían entregado respuesta alguna.