A pesar de las críticas y los malos mensajes enviados a la comunidad educativa e intelectual, el gobernador panista Javier Corral Jurado dará mañana jueves el zarpazo definitivo a El Colegio de Chihuahua para convertirlo en una oficina de colocaciones de aliados panistas y frenar el pensamiento crítico.
Y lo peor estará en el próximo director general de El Colegio de Chihuahua: el exrector de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, Rubén Lau Rojo, quien tiene una acusación formal ante la Procuraduría General de la República por enriquecimiento ilícito, según nota de El Universal del 10 de mayo del 2000, y su hijo es buscado por el asesinato de tres estudiantes.
Un grupo de abogados presentó pruebas duras: copia de un depósito de poco más de 877 mil dólares en el entonces banco Bancrecer sin acreditar origen, y fotografías de una mansión personal de más de 4.5 millones de pesos, bastante superior a la media de los académicos. La denuncia pareció ahogarse en los pasillos de los espacios judiciales politizados.
Además, Lau tiene pendiente el expediente judicial que señala a su hijo, según nota en La Jornada del 26 de julio del 2015, como presunto responsable del asesinato de tres jóvenes estudiantes de la UACJ. Dice la nota: “la principal línea de investigación es que el presunto homicida de tres universitarios es París Lau Campbell, a quien denunció una de las víctimas que fue trasladada lesionada a un hospital, donde posteriormente murió”. El arma homicida fue una 9 mm de uso exclusivo del ejército que portaba Lau Campbell; uno de los muertos era hijo de un policía ejecutado en 2010. El nombramiento de Lau para El Colegio de Chihuahua podría ser un certificado de impunidad al hijo.
Aunque es un organismo público descentralizado y los nombramientos de su director general tienen que cumplir requisitos burocráticos y académicos, Corral decidió desplazar al actual dirigente Samuel Schmidt sin cumplir con los requisitos legales. Sin embargo, Corral ha comenzado a usar los estilos autoritarios priístas para romper con el camino de independencia académica de El Colegio de Chihuahua.
Al paralelo con el asalto político a El Colegio de Chihuahua, Corral ha comenzado a mover otras piezas políticas. Una de ellas es la relación que han mantenido su actual secretaria de Innovación, Alejandra de la Vega, y su esposo con el partido republicano de EU, incluyendo donaciones en efectivo a las campañas de Donald Trump, Ted Cruz y Marco Rubio, prohibidas por la condición de extranjera de ella, su esposo es estadounidense.
En EU los donantes apoyan un proyecto ideológico compatible, pero en el fondo forman parte de la red de intereses políticos y con ellas además compran acceso a los candidatos. Hillary Clinton, por ejemplo, aceptaba donaciones a su fundación con miras a su campaña y las operaba como secretaría de Estado con acceso abierto a su oficina y desde luego pagándolas con algunas posiciones menores.
Por su cuenta y sin avisar al PAN, Corral parece haber comenzado a vender políticamente esa relación con Trump al entorno del presidente Peña Nieto, aunque ahí el encargado directo de las relaciones con Trump es el exsecretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso, por su contacto directo con instancias directas en el equipo familiar del próximo presidente estadounidense. De todos modos, Corral supone que los contactos de su funcionaria podrían ayudarlo a acercarse a Los Pinos.
Política para dummies: La política es la aspiración de llegar al poder para cometer los mismos abusos que se denunciaron desde la oposición.