Como regalo de año nuevo la administración del ahora presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, podría recibir carretadas de demandas por despidos injustificados, violaciones a garantías individuales y lo peor, puede costar a su administración cifras millonarias…”Un esquema de seguridad laboral” heredado de la administración calderonista, evitó a la actual hacer uso de plazas que le resultaban de mucha utilidad, ¿la razón?, los panistas dejaron muy bien anclados y posicionados a sus alfiles. Por ello se buscaron otras opciones, indemnizar saldría en un ojo de la cara…Bueno, pues de nuevo se afilan los cuchillos, pero a los despedidos se sumarán aquellos burócratas que, junto con sus dependencias, podrían ser enviados a otras entidades y además con menos salario. Hay tres despachos que llevan bateando 500 de porcentaje en este tema.
La rabadilla del Pollo
Pollos en el tejado me dicen que existe una verdadera preocupación por lo que está sucediendo en el Club San Carlos de Metepec, sitio en el que el robo a casa habitación se ha incrementado de forma drástica y hasta alarmante…Lo raro, mi querido polluelo, es que si preguntas a colonos sobre esta situación, todos saben dónde viven quienes se dedican al hurto en los domicilios, pues los ladrones, son jóvenes, hombres y mujeres de origen colombiano que sin el menor pudor o rubor han dejado ver a habitantes de este sitio su “oficio”… Por supuesto, existe temor en denunciarlos por obvias razones y por evitar las consecuencias que conlleva el enfrentar a esta banda. Lo que sí es seguro es que autoridades de diferentes niveles conocen de la situación y, por lo menos hasta el momento han abandonado a su suerte a los colonos de San Carlos. La pregunta es, ¿qué hacen las autoridades estatales y municipales al respecto? ¿Estarán esperando un arrepentimiento de los ladrones para entregarse. Esperarán a que colonos sean quienes los detengan? Ahora entiendo por qué “Águila” no quiso establecer su domicilio en el Club, no vaya siendo que le roben la patrulla. Ups…Cierro pico. Shalom.