Por décadas el priísmo mexiquense era el único que no se sometía al PRI nacional y tiene desde entonces sus propias estructuras corporativas locales por encima de las nacionales (sin excluirlas) como la CTC en lugar de la CTM, el SMSEM en lugar del SNTE o el SUTEYM en lugar de la FSTSE. Y si el tricolor tuvo su legendario “Grupo Sonora” y al Gral. Plutarco Elías Calles, los del Edomex tuvieron a su “Grupo Atlacomulco”, a Isidro Fabela y Carlos Hank González como sus líderes morales, incluso hoy en día existen todavía algunos que no se han retirado del todo, como Arturo Montiel o Cesar Camacho. Hubo momentos en el que el priísmo local se rebeló al poder central, como el previo a 1993 cuando no querían que le impusieran otro candidato a gobernador, como el famoso “betetazo” de 1987, pues a finales de su sexenio, Salinas de Gortari quería imponer a su tocayo Carlos Rojas y al final, ganaron los locales con Emilio Chuayffet. El caso más sonado fue para la elección presidencial del 2006 en el que Montiel pretendía la candidatura y varios mexiquenses, como la mayoría del priísmo del país apoyábamos a Roberto Madrazo. Seis años después por fin pudieron hacerse de la Presidencia de la República con Enrique Peña, y fue el sexenio del priismo mexiquense que se impuso al nacional, pero todo acabó en 2018. Ahora que perdieron ante Morena, a partir de septiembre, el PRI estatal pasará al control administrativo y casi totalmente político de Alejandro Moreno Cárdenas, Alito, y será él quien palomee las listas de candidatos, principalmente a diputados federales plurinominales, y para que haya un senador mexiquense, dependerá únicamente de su voluntad. Como dice un famoso corrido mexicano, “¿quién iba a pensar? ¡Quién iba a pensar!” … NOTAS CORTAS: Por cierto, los únicos seguros, por ahora, para el Senado de la República son Laura Barrera Fortoul, Enrique Vargas del Villar y José Alberto Couttolenc. Al tiempo … Feliz jueves, raza…Comentarios y mentadas: [email protected]