A partir del 16 de septiembre el PRI pasará a ser un partido más de oposición, y aunque es ahora la segunda fuerza política del estado y primera opositora, no se ve una figura que se convierta en su líder, pues nunca lo tuvo, en todo caso lo era el gobernador en turno que designaba a su presidente, y el actual “dirigente” del tricolor es el caso más ilustrativo, pues no es un líder sino un administrador, sin legitimidad ante la militancia, porque no fue esta quien lo eligió ni a ninguno de sus antecesores. El Revolucionario Institucional aún no sabe si continuará el actual o llegará Ana Lilia Herrera en su calidad de “Delegada Especial del CEN”, nombramiento que le otorga esa facultad estatutaria, o la ex candidata Alejandra Del Moral, quien podría tener más autoridad política por sus más de dos millones 750 mil votos obtenidos. Y no hablamos aún de cómo van a definir sus candidaturas locales y federales del 2024 ahora que no tienen “primer priista del estado” que los designe por su voluntad unipersonal. En esa situación interna, le impediría ser la voz de toda la oposición, ahora conformada en alianza, con excepción de Movimiento Ciudadano. Por todo lo anterior, el único que podría convertirse en el gran líder opositor en la entidad es el líder de facto de Acción Nacional en el estado, Enrique Vargas Del Villar, quien tiene los méritos más que suficientes y la legitimidad que le otorga el haber sido la figura no morenista, mejor posicionada en las encuestas previas a las definiciones de las candidaturas a la gubernatura de este año, pues siempre tuvo mayor preferencia que Del Moral Vela. Fue crítico con la Maestra Delfina Gómez en campaña, pero no ofensivo, como algunos otros aliancistas. El huixquiluquense será, con apoyo del PRI o sin él, senador de la República, y ahora sí, nada ni nadie le impedirá ser candidato a gobernador en el 2029… Que tengan un excelente jueves, raza…Comentarios y mentadas: [email protected]