Se concretó la tan temida (por algunos militantes) pretensión del presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno, de reformar los estatutos de su partido para reelegirse y agandallarse un segundo periodo, pero el asunto no está en que se reelija o no, sino que ya sin los principales e “históricos” cuadros del tricolor, como ex gobernadores y ex dirigentes nacionales, combinada con la ausencia de todos los ex presidentes de la República de extracción priista que aún viven, como Carlos Salinas, Ernesto Zedillo y Enrique Peña, Alito se consolida como el “líder” único, el dueño absoluto del otrora “partidazo”, sin tener que compartir el partido con otros líderes políticos o de grupos más que con el matrimonio Rubén Moreira–Carolina Viggiano, pues el resto de las carteras del CEN, en el que no hay un solo priista mexiquense, son puros personajes de bajo perfil, pero muy afines a él, de hecho, empleados personales que trae desde la gubernatura de Campeche. Pero los más satisfechos son, paradójicamente, su adversario, el partido que les ha ganado casi todo, Morena, su fundador el Presidente Andrés Manuel López Obrador y la virtual presidenta electa Claudia Sheinbaum, por lo que más de uno observa la coincidencia de que quedó precisamente el dirigente que les garantiza elecciones a modo, de ahí el mote de “Amlito” y el acrónimo de PRIMOR… NOTAS CORTAS: Por cierto, mientras algunos priistas mexiquenses se manifestaron en contra de Alito, mientras su presidenta se puso de tapete y fue exhibida y criticada en las redes sociales… Y mientras tanto, también se requieren cambios en la dirigencia nacional del PAN, y la opción más viable sería el senador electo por el Estado de México, Enrique Vargas Del Villar, pero éste asegura que será un legislador de tiempo completo…Que tengan un excelente martes, raza… Comentarios y mentadas: godinezalfonso@hotmail.com