En el Día de las madres, es obligatorio hacer la reflexión sobre aquellas mujeres que han perdido a sus hijos, a sus hijas por manos de la delincuencia, como sociedad ¿qué les decimos a esas madres que en lugar de celebrar, hacen recuento de las acciones realizadas y/o por realizar para localizar a sus vástagos? ¿Cuántas de ellas en lugar de festejar compartirán con otras mujeres su condición de mujeres despojadas de sus hijos y sin la posibilidad clara de encontrarlos o encontrarlas? La Región de los volcanes ha tenido desafortunadamente aumento en las cifras de casos de feminicidios y muchos de éstos han sido de mujeres madres, jefas de familia, y simplemente por el hecho de ser mujer.
Dado lo anterior tenemos que es fácil encontrar a adolescentes convirtiéndose en mamá de sus hermanos y que no reciben apoyo alguno, a esas madres jóvenes que por necesidad se convirtieron en madre, ¿qué les decimos, cómo afronta la sociedad y el estado estos casos, hay registro de ellas?
Recordemos que esta Región de los volcanes tiene en su orografía comunidades de bajo desarrollo y que estamos dentro de las poblaciones que suman a la estadística casos de embarazos adolescentes. Es necesario que las mujeres que hacen política en esta región oriente, trabajen más por sus pares y que adjunto a la celebración por el día de las madres den cuenta también de logros a favor del sexo femenino; el día de las madres no puede seguir siendo de ramos de flores, mariachis o tríos.
Según datos de la OCDE México está dentro de los países de Latinoamérica donde el índice de embarazos adolescentes es bastante alto, y se dice que este fenómeno está directamente ligado a la marcada desigualdad social y la mala distribución de la riqueza y, para menguar esta condición el gobierno ha implementado programas sociales de apoyo a los grupos más vulnerables de la población, apoyos que han sido una gran ayuda para miles de familias, adultos mayores y jóvenes embarazadas, esto es bueno considerando los apoyos como una acción para paliar las necesidades prioritarias como lo es el comer y la atención a la salud, podemos decir que está bien, que son sin duda, estrategias que benefician y le dan un respiro a quien recibe; sin embargo es necesario hacer un estudio a profundidad de los resultados obtenidos.
Qué se está haciendo equivocadamente, o qué se está dejando de hacer, que los embarazos en adolescentes siguen a la alta? ¿qué mensaje subliminal se le da o qué interpretación le dan quienes reciben este apoyo? que con el paso de los meses lo ven como un derecho irrenunciable en lugar de un apoyo. ¿Alguien sabe de la evaluación de este programa? ¿A qué se comprometen las adolescentes que lo reciben? ¿Cuánto tiempo lo reciben? Alguien se ha preguntado ¿qué opinan los padres de estas adolescentes? Y los padres del joven que embarazó, ¿qué dicen, qué le dicen a ese adolescente? ¿A qué grupo social y económico pertenecen mayormente estos embarazos?
Este tema se complica más si uno se pregunta cuántos de estos embarazos son producto de una violación, porque también es el caso; que no se diga, no significa que no existe.
Señoras diputadas locales y federales ustedes pueden marcar la diferencia del próximo festejo del día 10 de mayo.
Esto se escucha en los pasillos del corredor de la región de los volcanes.
CATALINA HERNANDEZ MEZA
mail columnistas@capitaldemexico.com.mx
@capitaledomex