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#Dobleces Opositores de Aldana

 

Al interior del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) existe una paz simulada en torno a Ricardo Aldana Prieto, secretario general del sindicato petrolero. En su nueva etapa, ahora, avalada por la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, está en una posición inestable y de relevo inmediato. Desde el Congreso, diputados de […]


Al interior del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) existe una paz simulada en torno a Ricardo Aldana Prieto, secretario general del sindicato petrolero. En su nueva etapa, ahora, avalada por la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, está en una posición inestable y de relevo inmediato.

Desde el Congreso, diputados de Morena y del PT le han hecho saber a Ricardo Aldana que su lugar es una pieza de cambio al mejor postor. No es el dirigente sindical favorito del partido en el poder, pero es un aliado para la movilización del corporativismo sindical.

La dirigencia de Aldana tiene malquerientes que orbitan en la cuatroté. La diputada morenista Gloria Sánchez López apoya a una parte de la disidencia del STPRM. Desde San Lázaro levantó el brazo al Sindicato Nacional Petrolero “El Águila”, encabezado por Julieta Hermosillo Gómez. En el gobierno reconocen a Aldana y los legisladores lo repudian.

La democratización del sindicato petrolero es el tema preferido para exhibir la anquilosada dirigencia de Aldana Prieto y la legisladora ofrece un espacio para tener una mayor negociación y tener dentro de sus seguidores a una parte de los trabajadores petroleros.

En tanto, el diputado Reginaldo Sandoval, coordinador del Grupo Parlamentario del PT, maneja a otra facción de STPRM a través de Juan Martín Morales Barrera, integrante del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) y líder de la planilla “Fuerza Oro Negro”. Estos grupos disidentes encontraron en los legisladores el eco necesario para reconfigurar sus acciones de oposición y ser legitimados y no navegar en la disidencia estéril.

Tras rendir protesta para el periodo 2025-2030, Ricardo Aldana ratificó su compromiso con la cuatroté, y la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, atestiguó ese momento. Esa era la señal clara de que los petroleros están con la cuatroté. Sin embargo, hay diputados que se declaran enemigos abiertos de Ricardo Aldana.

Al interior del sindicato, Aldana ganó por el aparato local de cada sección afín a sus intereses; sin embargo, la base trabajadora acusa de fraudes y de movimientos de intimidación para la imposición del dirigente petrolero heredero de la tradición más leal al partido en el poder en turno.

Sin embargo, Reginaldo Sandoval al igual que Gloria Sánchez aprovechan a la disidencia petrolera para golpetear a Ricardo Aldana y poner en duda que el gobierno federal aplicara la ley en materia de libertad sindical. El Congreso se convirtió en un dique para el dirigente petrolero, los legisladores de la cuatroté movilizan a la disidencia y el gobierno federal legitima al dirigente oficial del STPRM.

El sindicato petrolero se encuentra sumido en un pasado político rebasado por la corrupción y de un futuro incierto y de indefinición política frente a los compromisos adquiridos con la cuatroté. Ricardo Aldana mantiene un bajo perfil, pero actividades redituables para sus intereses económicos y políticos a costa de un sindicato negado a morir o renovarse.