Dante Delgado comenzó a mover el partido naranja a su antojo de nueva cuenta. La democracia interna se acabó y retomó su esencia de partido unipersonal. La reciente jugada de barajar el nombre de Jorge Álvarez Maynez, como posible candidato a la Presidencia de la República sólo es una pantalla. Después de la primera quincena de este mes, el dirigente eterno de emecé presentará a su candidato, pero lleva la marca de la dirigencia dantesca.
El próximo 11 de enero, el partido naranja desahogará al interior del partido la impugnación al proceso interno en el que Samuel García se enredó en lo legal, lo político y exhibió que el partido no opera si no es bajo la mano dura de Dante Delgado.
Entre tanto, el dirigente histórico comienza a buscar los apoyos en los estados en los que tiene presencia en las gubernaturas. Sin embargo, es tan amplia la pérdida de interés en la vida interna del partido que todo se mueve con lentitud. La fecha para tener amarrado un precandidato y posterior abanderado, sería el 5 de diciembre por ser el aniversario del partido. La fecha pasó y de nueva cuenta, el dirigente mintió a su propia militancia. Y es que la dependencia por más de 20 años a otros partidos arrinconan a Dante Delgado a pasar como un dirigente contestatario y renegado de todos los partidos con los que llevó a cabo alianzas de conveniencia. Movimiento Ciudadano está a la deriva y se enfila a pasar el proceso electoral más relevante de la historia moderna del país como una institución sin propuesta ni de contrapeso real frente a la polarización existente en la actualidad.
Álvarez Maynez, se presta al juego de nombres para perfilar a un candidato leal a la dirigencia y evitar un desfonde. Pero solo es temporal. El objetivo es el blindar al partido con un candidato que evite que se desmorone. Al tiempo de cubrir los movimientos y acuerdos de Dante Delgado.
En Jalisco, Enrique Alfaro tiene sus reservas sobre apoyar al diputado federal como aspirante y desdoblar la maquinaria emecista a su favor, ya que le regatea apoyo al señalarlo como el manipulador de la confrontación con Dante Delgado.
Mientras que en Nuevo León tampoco se registra un gran apoyo hacia el legislador federal, ya que se comenzó a gestar al interior del partido que debería ser una abanderada para poner en la misma línea a las candidatas de los dos bloques y mantener un proceso electoral competitivo.
Álvarez Maynez tiene pocas posibilidades para ser un candidato con fuerza. La reciente encuestas de Mitofsky publicada en diciembre pasado, ubica a Movimiento Ciudadano en 8.5 por ciento en las preferencias. Tendría que hacer una campaña potente para desbancar a cualquiera de las dos precandidatas y quitarle a Movimiento Ciudadano el estigma de partido satélite de Morena. Ubicarse como opción viable ya no está en tiempo. El partido se encuentra en la lona y los triunfos para junio próximo solo serán pírricos, ya que Dante Delgado jamás preparó cuadros y la estructura suficiente para una campaña del tamaño de la que se avecina.