Convertida en la corriente política dominante, Nueva Izquierda, dio un salto más y, a través de su dirigente Jesús Zambrano, tomó el papel de grupo político depredador. Ahora, Isaías Villa, candidato a diputado local por el Distrito VI, e integrante de Los Chuchos, trazó la ruta de la traición dentro de las filas de su partido.
A través del método de la imposición y la preponderancia de la dirigencia zambranista, Isaías Villa, rogó A Zambrano para que lo impusieran como candidato a diputado local en el Distrito VI de Gustavo A. Madero, por encima de dirigentes locales con trabajo territorial a lo largo de varias décadas.
Cuando se creía que Villa González tenía cumplido el capricho político, a través de la mano de Zambrano, comenzó a desconocer a sus correligionarios y la primera víctima de estos arranques fue el perredista Emiliano Rojas, quien va como diputado suplente en la fórmula de Isaías Villa. Es decir, la imposición, el amiguismo y la traición en Nueva Izquierda es permitida por el dirigente nacional del PRD, sin importar que se vulneren los preceptos democráticos bajo los que nació el partido del sol azteca.
Emiliano Rojas es hijo de Gonzalo Rojas y de Carmen Pacheco, candidata del PRD en el Distrito 1 local de Cuautepec, en Gustado A. Madero, y ex candidata a alcaldesa en la misma demarcación en 2021. Ambos con un historial de trabajo político y territorial en la alcaldía.
Sin embargo, resulta que por extraños y oscuros intereses —hace unos días— apareció el asesor externo de la alcaldesa Alfa González —cercana a Zambrano—, Omar García, a quien Isaías Huerta le ofreció ser su suplente y sacar de la jugada a Emiliano.
En este capítulo de choque en la alcaldía Gustavo A. Madero, Isaías Villa abrió un frente al interior de su candidatura, por obediencia a ciegas, aunque no le será tan fácil, ya que difícilmente Emiliano renunciará a ser suplente, a menos que el candidato a diputado en uno de sus tantos excesos lo saque del camino.
Villa González no era así. Durante mucho tiempo Isaías Villa estuvo en el grupo de Gonzalo Rojas en los inicios y años dorados del PRD en la Ciudad de México, incluso fue su suplente cuando Rojas Arreola se desempeñó como diputado.
Tanta era su camaredería que Isaías Villa le pidió a Gonzalo Rojas que fuera el padrino de su hija; es decir, se convirtieron en compadres. El asunto se descompuso cuando Gonzalo buscó ser candidato a delegado en la Gustavo A. Madero en 2003.
Sin embargo, Rojas fue vetado por Andrés Manuel López Obrador, porque en su lugar Gonzalo destapó a Demetrio Sodi para la jefatura de Gobierno. Lejos de ser parte de la causa de Gonzalo Rojas, Isaías Villa junto con otros líderes de Nueva Izquierda respaldaron el veto a Gonzalo Rojas y aceptaron los espacios que la dirigencia del PRD les ofreció en pago por su traición. Por eso ahora su juego perverso contra Emiliano.
Israel Mendoza Pérez
@imendozape