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Opinion

E-laborando

@jgarciabejos

Hoy que celebramos el Día de las Madres, el Estado de México está trabajando más fuerte que nunca para consolidar un gobierno cercano a las mujeres, el cual impulsa a través de acciones y estrategias interinstitucionales e involucrando a los tres niveles de gobierno, una plataforma social que permita el desarrollo pleno de las mujeres mexiquenses de todas las edades.

En particular, la política laboral de Eruviel Ávila no solo ha puesto a la persona al centro de toda acción emprendida, sino que ha asumido un compromiso permanente con el bienestar de un grupo en particular: las mujeres que trabajan, que buscan salir adelante y son el pilar fundamental de sus hogares. Gracias al trabajo en equipo con la administración del presidente Peña Nieto, hemos fortalecido las capacidades de las nuestras. De esta manera, dos de cada tres de los casi 6 mil apoyados por Fomento al Autoempleo han sido mujeres, en su mayoría jefas de familia, y también son el 75% de los 84 mil beneficiados por Bécate.

El que se impulse el emprendedurismo familiar implica que no solo las mexiquenses pueden mejorar la vida de sus hijos, sino que además fomentan la creación de empleos de calidad para sus comunidades. En este contexto de inclusión y equidad de oportunidades, estamos cerrando las brechas salariales y fomentando cada vez más la participación de las mujeres, llegando a la cifra histórica de más de 3 millones que forman parte de nuestra fuerza laboral.

Estos resultados refuerzan lo que hace la entidad en materia de seguridad, por lo que lo anunciado ayer para tener mexiquenses mejor protegidas cobra mayor relevancia. En cumplimiento de la alerta de violencia de género, el programa “No dejemos que las arranquen de nuestra vida” será fundamental para que las mujeres puedan desenvolverse en un mejor entorno y seguir siendo un motivo de orgullo para todos los mexiquenses. El sector trabajo apoyará con becas de capacitación para víctimas de violencia y para sus hijos, impulsando además la perspectiva de género en todas las especialidades que se imparten en las 44 EDAYOs.

Con estas acciones, demostramos que uniendo fuerzas y poniendo cada quien su parte, podemos hacer de la violencia de género un cáncer del pasado. Prueba de ello es que más de la mitad de los 630 atendidos por la Oficina Naranja de la Procuraduría de la Defensa del Trabajo han sido mujeres acosadas o discriminadas por embarazo o lactancia. Desde el ámbito laboral, los factores de la producción junto con el gobierno trabajan para que la mujer sea clave en la vida económica del estado, y con las estrategias que se anunciaron ayer, estoy seguro que así será.

Nuestro Dato: La tasa de participación de las mujeres en el estado creció 9 por ciento en lo que va de la administración, al pasar del 41.9% a 45.7% (tercer trimestre 2011 vs. cuarto trimestre 2015).

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