Aún no empieza el partido, el juego en serio y ya los jugadores se están quejando de faltas graves, entradas arteras, apoyo extra cancha y de que el árbitro va a ayudar al que salga ganador, sea cuál sea, ella o él. No hay los elementos suficientes y necesarios, pero pues eso, en este momento, no es una situación que importe; primero la queja y ya después lo demás o como dicen en el pueblo, “me pongo el huarache antes de espinarme”… Todos están afilando machetes, en sentido figurado, por lo menos es lo que pienso, para llegar con todo a la contienda, ahora sí la de en serio, nada de calentamiento, nada de primero nos estudiamos, ahora sí los trancazos serán en serio. Ya desde ahora, están sacando a la luz las trampas que se harán y las que se hacen. Ya nos platican cómo es que nos verán la cara, todos los “chanchullos” que en nuestra nariz se prodigarán en hacer y cómo es que llegarán a consumar el acto de prestidigitación más grande de este año…
¿Sería exagerado decir que todos nos ven la cara, de que nos verán la cara? Pues no. Es en serio que tanto partidos políticos como los propios “aspirinas” piensan que, en cuanto nos muestren uno o dos de a mil, corriendo nos vamos a ir a votar por él o ella. ¿Entonces que hacer? dar más que el otro sería encarecer la transacción y así no habría dinero ni presupuesto que alcance, ¿pero entonces? pues hay que jugarse con la estrategia de culpar al de enfrente antes de que nos señalen a nosotros, y si lo hacen, pues siempre tendremos la ventaja o el chance de decir que ya lo hacen por “ardillas” y no tienen nada de soporte las declaraciones, así de sencillo. Reclamaremos todo y más, siempre acusando al contrario.
LA RABADILLA DEL POLLO
Pollos en el tejado me dicen que en la calle de Instituto Literario, pasando Aldama los taxistas de plano ya retan a las autoridades y al mediodía hacen base frente a una farmacia… Ni se mentadas de “mother” de camioneros los mueven y cuidado alguien se atreva a reclamarles porque, eso sí, en bola son bien machos… Cierro pico. Shalom.