Gratamente me sorprendió el plan de acción anunciado por la administración de Alfredo Del Mazo Maza para cerrar la puerta a contagios por el coronavirus en territorio mexiquense. El Ejecutivo en el anuncio fue consciente y puntual de lo que la sociedad reclama. Información clara y precisa: una bolsa de 300 millones de pesos, seis hospitales en donde se dará prioridad a la atención de posibles casos o en curso, medidas en la administración para reducir al mínimo se propague, no se paralizará el trabajo del gobierno y concretamente, el número de afectados…Se esperaba, por lo menos este alado sí, una acción de esta magnitud en la administración de Del Mazo Maza para evitar que los “conjuristas” de su trabajo se dieran un festín de agrias críticas. Con Gabriel O´Shea, su secretario de Salud, puntualizaron en dónde, cómo y cuándo de la atención…Debe retomarse el que se toman las medidas necesarias y pertinentes, porque el caso así lo amerita, porque la prevención debe estar antes que la atención. Porque la solución a los problemas inicia con el reconocimiento de ellos. Esa es la impresión que deja a este emplumado la conferencia a medios con el Ejecutivo estatal. No se crea pánico, tampoco se ocultan casos o se magnifican hechos, es mucho más simple, se reconoce la existencia de un tema delicado, pero se asumen acciones responsables para atender los existentes, hacer labor de prevención y contención sin causar alarma en la población. Ahí están las más de 8 mil camas certificadas en terapia intensiva, los seis hospitales que dan atención y seguimiento puntual a los probables casos o los ya declarados y un techo financiero de 300 millones de pesos para la compra de insumos y medicamentos. Un trabajo impecable, sobre todo, porque no se niegan los hechos, sino se afrontan.
La rabadilla del Pollo
Pollos en el tejado me dicen que este “break” a algunos alcaldes les ha caído de maravilla, perdón por el contrasentido, pero han encontrado un tema más para alargar tiempos en que deberán cumplir con compromisos asumidos desde las campañas…Será un mes, quizás un poco más el tiempo que ganarán con la suspensión de actividades y por lo mismo, con el tema de liquidar deudas…Uno de los problemas que deberán sortear presidentes municipales y sus respectivos cabildos será acotar el tema de intereses por los ya muy comentados retardos en pagos y demás. A finales de la semana pasada, por una “diosidencia” me tocó escuchar parte de la plática entre un alcalde y su respectivo proveedor…La queja del segundo es que no había trabajo y menos pagos. La respuesta vino a bote pronto, trabajo sí hay y muchos, pero sí, lana no hay…Shalom. Mi correo es: alfredo.albiter@capitalmedia.