Mutilar el Estado de México
No es una novedad pretender, otra vez, mutilar la entidad mexiquense para dar paso a un nuevo estado, y si no me falla el disco duro hace menos de dos décadas también se preparaba todo para el alumbramiento del Valle de Anáhuac. La posibilidad de este nacimiento se aparejaba con una redistritación que incluía el Valle de México y la Zona Oriente. Como ya lo habrás de imaginar, la propuesta también se hizo en la cercanía de comicios, se pretendía aprovechar la ocasión para darle una tarascada más al Estado de México, que si otra vez no me falla el disco duro sería la número nueve. Caray qué cosas ¿no?…Y aún así hay quienes no entienden por qué la gente le da vuelta a los políticos. Es muy fácil, si se quiere, darse cuenta que los tiempos han cambiado y ahora refrescar la memoria está a un “click” de computadora. Ni de ladito, ni fingidito, ahora se avientan las cosas sin el menor rubor. El interés por la Zona Oriente es evidente y ninguno de los actores involucrados niega pretensiones. Lo cual estaría súper bien si se tratara de un concurso de honestidad, pero pues no lo es. Se trata de una decisión de conveniencia partidista y quizás sí, política, pero no de interés general sino de algunos cuantos…Primero sondearon la división de Ecatepec y ahora se van más a fondo con el estado, el tema es que ambos están sumamente ligados. Los dos tienen como objetivo principal, no el territorio, sino el padrón electoral, el número de votos que pueden significar el municipio más poblado y el valle que concentra a la mayor población del Estado de México…Por eso la insistencia, como vemos la propuesta para nada es original, sino un intento más por el control electoral…A quien en estos momentos, cuando la temperatura política empieza a subir y subir, se le podría ocurrir que no habría un acuerdo entre posiciones antípodas, PAN/Morena, pues así es, como dicen, el agua y el aceite pretenden unirse por algo. Los votos son los votos.
La rabadilla del Pollo
Pollos en el tejado me dicen que el retorno a las actividades de algunos negocios que no se habían considerado como esenciales han dejado más dudas, pues a pesar de las ansias por regresar a la normalidad prevalece la precaución…En la mayoría de los gimnasios y pese a las medidas sanitarias, la “ocupación” no es la esperada o añorada, la razón que han expuesto clientes y usuarios está relacionada con la posibilidad de que “asintomáticos” puedan ser un vehículo de contagio…Es de esperarse que con el transcurso de los días las cosas cambien para bien y se puedan reiniciar las actividades casi con normalidad, pero en este momento no deja de ser un buen deseo. Cierro pico…Shalom. Mi correo es: alfredo.albiter@