Como diría aquel, hemos estado tan preocupados por correr lo más rápido posible para llegar a ningún lado, que en ocasiones, cada vez son más, perdemos de vista el objetivo para ir resolviendo lo mediato, sin importar que eso nos lleve a desviarnos bastante del destino… ¡Uy alado!, como que ya te hicieron daño los tacos de suadero o, ¿en qué andas? Perdón, perdón me salí un poquito del tema, pero voy de retache. Reconozco que se me fueron la cabras al monte, pero el meollo del asunto es que en el tema de la equidad de género de pronto nos volvemos más papistas que el Papa y terminamos por irnos al lado contrario.
Me explico; para subirnos en el tsunami electoral a los cuatro vientos, pedimos, exigimos la equidad de género, 50-50, mitad y mitad, recordarás lectora, lector queridos que incluso esa paridad ya es obligatoria, pero mañosamente no decimos qué mitad le toca a cada sector, si la de arriba o la de abajo, la de luz o la de sombrita… Voy de nuevo más allá…
Las mujeres deben tener 50 por ciento en candidaturas. Orales va, pero como que se nos traba la lengua al momento de decir; aunque no lo queramos, no es lo mismo que las pongan como aspirantes a la presidencia municipal que a una regiduría o a la sindicatura, es más, tampoco es igual ir como secretaria del ayuntamiento… El tema de las diputaciones no es muy diferente, también ahí existen las formas y los fondos… Ya te entendí alado. Pues sí, no es lo mismo la mitad de arriba que la mitad de abajo. Más o menos de ese tamaño es la complejidad del tema y, como se observa, también dejar a todos contentos será difícil por la óptica. No es lo mismo ver la función en zona VIP que en gayola o el segundo piso. ¡Uy, que barbaridad!
LA RABADILLA DEL POLLO
Pollos en el tejado me dicen que caminar por jardines públicos se ha convertido en toda una odisea digna de ser contada a los nietos… Si piensas que es por la inseguridad no atinaste. Si creíste que es debido a la escasa luz, tampoco… El tema está con los roedores. Ya platicaremos más… Cierro pico. Shalom.