Aún falta un trimestre y centavos para llegar al 2024 y más meses para la elección en donde se habrán de renovar ayuntamientos, diputaciones locales y federales, senadores e incluso la Presidencia del país, pero como se ha roto con los protocolos de tiempos y formas, pues las y los aspirinas andan en plena carrera para llegar antes y ser ellos o ellas quienes encabecen las listas…Por cierto, en esta ocasión las plurinominales son las más deseadas, cotizadas pues. Las fórmulas o escenarios dan como más chance de llegar a los asientos en esta formalidad -diputaciones y Senado- pues hoy por hoy, es un volado pensar en cómo serán las campañas y sus resultados, en clara referencia a los votos conseguidos. Mientras que en la “pluri”, pues el pase casi es automático, a menos que suceda una verdadera tragedia, bueno para unos y el carro súper completo para otros. Así lo dijimos en la entrega anterior “No son pocos, tampoco serán muchos, pero sí un número significativo al momento de hacer las designaciones de hombres y mujeres que contenderán en la elección del 2024, cuyos castillos de naipes se vendrán abajo por temas de deudas de pensiones alimenticias, denuncias por violencia doméstica y lo que se acumule…Me explico, puede que la mayoría de ellos/ellas resulten absueltos conforme se desarrolle el proceso y les digan el clásico “usted disculpe”, sin embargo, si los tiempos no coinciden o mejor aún, coinciden con la presentación de documentos, “torció el rabo la marrana”, pues no podrán calificar a la ansiada candidatura, no les darán los tiempos pues. Y sí, en este momento hay casos, pero también se sumarán otros”…La razón es lo que señalamos en las primeras líneas, pues no hay certeza, conforme se vaya avanzando y llegando el momento el panorama -lo prometo- será muy diferente, nada tendrá que ver con lo de hoy. Por ello, también se acortarán y las prisas estresarán a las y los “suspirantes”, si alguien decide entonces presentar una demanda, mientras se sigue el proceso y se determine, causará mucho daño y para cuando den el resultado, pues menos se podrá reparar la afectación. En Redes Sociales la afectación llegará a un sector, pero lo dicho en medios de comunicación -por más que digan sólo un pequeño sector lee, ve y oye noticias- los estragos serán casi irreparables, por aquello de la percepción. Pero a este tema ya le entramos en la siguiente entrega.
La rabadilla del Pollo
Pollos en el tejado me dicen, en lo que hasta el momento han narrado los emplumados en Santiago Tianguistenco es lo menos, pues la inseguridad es galopante, día tras día se registran robos y atracos, sin que la policía intervenga. Los días de plaza, de plano es un festín el que se da la “maña” con los locales y quienes acuden al tianguis. El robo de autopartes, cristalazos y cobro de piso, es casi una tradición en ese día. Raro, la mayoría de la población lo comenta y lo sufre, pero no lo percibe el alcalde ni su policía, ni funcionario alguno. ¿Será que andan con el síndrome de los otros datos?…Aunque el INEGI diga lo contrario, por hoy, cierro pico. Shalom. Mi correo es: alfredo.albiter@capitalmedia.mx