Pues sí, después de los resultados del 4 de junio, un buen de políticos y políticas se sintieron en la orfandad, todo lo que se había planeado tomó rumbos diferentes. Los más desesperados o adelantados decidieron buscarle, casi al día siguiente de la jornada, en otras opciones, aunque ello significara, pues tener que hacer un poco de esfuerzo con la espalda. Otros más, decidieron pasar el duelo y entonces analizar las opciones, primero de permanencia y después de otros lados. Unos más lo han tomado con la calma que reclaman los tiempos, conocedores de cómo son las cosas, se mantienen tranquilos, expectantes y con los oídos y ojos bien abiertos para encontrar la señal que les dé luz… Pero hay otro escalón más, son aquellas y aquellos políticos que conscientes de sus habilidades, de su conocimiento, trabajo, dedicación y más, pues han recibido llamadas para, primero, reconocerles y segundo, conocer cuáles son sus planes en el corto y mediano plazos. “la crème de la crème”, aquellas y aquellos cuyo valor personal les da para ser buscados, para pensar hacia dónde ir y tomar la mejor decisión. De esos pocas y pocos, pero por fortuna los hay.
La rabadilla del Pollo
Pollos en el tejado me dicen, en Zinacantepec andaban muy alborotados, porque suponían -bueno alguien sembró la idea- de que el primer iluminado del municipio, Manuel Vilchis Vivero, podría acudir a la mañanera con la gobernadora electa, Delfina Gómez Álvarez y el gobernador Alfredo del Mazo Maza. Bueno, pues él lo creyó, nosotros sólo transmitimos ese hecho… Ya sé que me dirán, no manches pollo cómo podrías creer algo así. Pues sí tienen toda la razón, pero en mi descargo diré, “yo no lo pensé”, no me pasó por la mente, pero quienes se encargan de endulzarle el oído, pues cómo de que no…La razón es muy sencilla, aclaro para no estar considerado, cuando eres desagradecido y desconoces a quienes te ayudaron, a quienes te apoyaron, te impulsaron pues, no puedes esperar te reciban con fanfarrias y globos. Por lo que me dicen, se le olvidó aquel viejo comentario de el último minuto también tiene sesenta segundos, abundaríamos para ser un poco más claros, el sexenio tiene un último día de 24 horas y ese aún no llega…Y no, no se trata de una venganza, para que no se ande tirando al piso, se llama reciprocidad, en Palacio Nacional le dicen “amor con amor se paga”, aquí sólo le regresan la cortesía. En lugar de enojarse sería de mucho bien para su hígado hiciera un “escauteo” para ver en dónde está la fuente indiscreta o la otra, pues mejor no andar “alardeando”…Ya le seguimos, esto sube de tono…Aunque el INEGI diga lo contrario, por hoy, cierro pico. Shalom. Mi correo es: alfredo.albiter@capitalmedia.mx