Según estudios especializados, menos del dos por ciento de quienes venden o compran un vehículo seminuevo, de privado a privado, optan por hacer el cambio de propietario tal y como lo exige -o pide- la Ley…La razón es muy sencilla, se debe pagar un porcentaje -creo del dos por ciento- por la transacción realizada -compra venta- y por supuesto ninguna de las dos partes tiene ganas o deseos de pagarlo. Más aún, un gran porcentaje de compradores piden no hacer el endoso correspondiente, sino sólo dejar la firma, ¿por qué?, también es sencillo entre más endosos tenga la factura, menos precio para la venta o cambio.
La rabadilla del Pollo
Pollos en el tejado me dicen, independiente al resultado de investigaciones sobre el “fusilamiento” de 17 personas en Michoacán -quiénes la ocasionaron, quiénes lo ordenaron, quiénes eran, cuál fue el mensaje, el objetivo y la razón- está muy claro el recado, la delincuencia organizada es capaz de hacer una demostración de poderío -terrorífico- y después con una velocidad pasmosa “limpiar” el lugar, al grado de casi borrar cualquier huella. Todo a plena luz del día, con rapidez de quién sabe cómo, dónde y qué hacer en este proceso. Por supuesto, una acción de estas tiene como fin que la misiva llegue a uno o varios destinos -sobre todo, por la forma en que se realizó el evento- y si me lo permiten creo firmemente, los destinatarios hicieron acuse de recibo, todos a su manera, sus formas y con sus precauciones, pero lo hicieron…Habrá que esperar el resultado de las investigaciones, sin embargo, insisto, el mensaje llegó, directa o indirectamente a los destinatarios. Eso ya fue, ahora habrá que esperar el mensaje de regreso, la forma de contestar, cómo y con qué. Vendrán más cosas, pero con horror aprendimos algo, en los grupos criminales hay tal organización que cuentan con gente capaz de “limpiar” la escena del crimen, al grado de no dejar huella alguna. Hay quienes dicen, en los hechos de Michoacán, sólo “medio” limpiaron, porque así lo decidieron…Otros emplumados en el hilo me comentan, poco a poco renacen talleres o centros de preverificación, donde, dicen, ponen a punto el vehículo para no tener problemas al momento de pasar la verificación. Puede no ser del todo correcto lo dicho, pero así se anuncian, y bueno, pues habrá quien les crea. El punto es, algunos ya se aventaron hasta a mencionar por una cantidad más, llevan el vehículo a realizar el trámite y se les garantiza la aprobación, algunos hasta se avientan a comprometerse con la calcomanía Cero o doble Cero…La primera parte podría ser, digamos natural, pues un mecánico conoce cómo poner a punto el motor ¿no?. Pero lo que llama la atención es ¿al grado de saber cómo “ajustar” para pasar la “anticontaminante” sin problema alguno? Si esto es verdad, pues sencillamente wow. Voy por mi calcomanía Doble Cero…Por hoy, cierro pico. Shalom. Mi correo es: alfredo.albiter@capitalmedia.mx