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#ElPicodelPollo Ciudad fantasma

 

En eso está convertida la capital del Estado de México, es una ciudad fantasma donde después de las 19:00 horas empieza a “morirse” la actividad y las opciones para cenar se van reduciendo a cero. De no ser en Venustiano Carranza, -donde la mayoría de los negocios se convierten en antros- o son espacios para […]


En eso está convertida la capital del Estado de México, es una ciudad fantasma donde después de las 19:00 horas empieza a “morirse” la actividad y las opciones para cenar se van reduciendo a cero. De no ser en Venustiano Carranza, -donde la mayoría de los negocios se convierten en antros- o son espacios para el “aunque sea unos tacos”, en el Centro se torna oscuro y peligroso. Oscuro, porque son mínimos los negocios abiertos -regularmente bares o donde se vende chupe- y peligroso, porque apenas dejas tu automóvil en alguna de las calles, lo pones en peligro de un cristalazo o lo expones al robo de la batería o la computadora, dependiendo del modelo. Ya ni digas si dejas cosas al interior, aunque no estén a la vista. La culpa de quién es, no pues ni intentes decir que es de la autoridad por la inseguridad, pues apenas hay elementos para hacer algunos recorridos y pegarle a la extorsión en algunas zonas. Ya abundaremos en el tema.

La rabadilla del Pollo

Pollos en el tejado me dicen, las declaraciones del presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac) en el Valle de Toluca, Christian Muñoz le dijo a la reportera de Capital Estado de México, Fernanda García, que se analizaba la posibilidad de un aumento en las cartas para el próximo semestre, pues los insumos utilizados por los agremiados están por las nubes -obviamente hablando de precios- y además, -aportación de este espacio- por la sequía, broncas hídricas y así, pues los platillos de temporada y las mismas provisiones tendrían un crecimiento. Vaya, al buen entendedor, todo carísimo. Cómo pensar entonces, se pueden mantener los precios en cartas cuando ya es evidente hay pérdidas. Según estudiosos del tema, las ganancias en el sector rondan el 30 por ciento -ya no son lo mismo de antes alado- hoy han bajado por distintas circunstancias, pero tampoco te mentiríamos diciendo no son negocio… Bueno, pues en este espacio consideramos lo dicho por Christian Muñoz, tiene mucho más de lo leído en primera instancia. Me explico, no se trata de una declaración al “alimón”, sino de una que conlleva mensajes. Naaa, nada de encriptados o sólo para iluminados, sino mejor aún para todos, sociedad, empresarios y gobiernos. Me explico otra vez, sus palabras llevan en sí una advertencia sobre lo que podría pasar si no se toman las previsiones y decisiones a tiempo. El círculo virtuoso que forman los tres mencionados puede convertirse en un dolor de cabeza con dimensiones no imaginadas y además con consecuencias para los tres, bueno para todos…Vamos a suponer, sólo suponer, que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) logra atinarle y en la entidad las Unidades Económicas (UE) son más de 76 mil, algo así como el 40 por ciento. Te imaginas lectora, lector queridos una crisis en el sector, obviamente afecta al empresario con la pérdida correspondiente de su patrimonio, pierde la sociedad por las centenas o miles de familias que dependen del sector -garroteros, meseros, pinches, etc- y también le afecta al gobierno, porque deja de recibir dinero que ellos tributan. Por supuesto, la afectación colateral sería más amplia. Luego entonces lo dicho por el “presi” de la Canirac lleva más fondo del que pensamos. Insisto no es una amenaza, es una advertencia de algo que podría darse en el mediano plazo. Ya le seguimos…Aunque el INEGI diga lo contrario, por hoy, cierro pico. Shalom. Mi correo es: [email protected].