Como ya es una costumbre decir, en la última entrega esto dijimos; “A quienes les parece exagerado que dos “potros” -elementos en motocicletas- le vayan abriendo paso, que lleve tres camionetas blindadas y una Pick Up de retaguardia con elementos que portan armas largas, podría parecer que viven en una burbuja, en otro país o de plano no salen de su casa”…La inseguridad en las calles está para llorar. Si le pasa algo a Don Andrés Andrade, no sólo lo vamos a lamentar por el cargo que ostenta, sino que nos privarían de un tremendo actor, de esos que parece se habían acabado con la época de oro del cine nacional, no lo permita el universo, es más, que sumen dos camionetas más y en la retaguardia cierren los carriles centrales de Paseo Tollocan, hasta que esté a salvo en su “casita” de San Martín…Insistimos, tiene toda la razón, no debe escatimar en su seguridad, tampoco en el de su familia, los malhechores aprovechan cualquier descuido o distracción para hacer de las suyas y vaya que si el funcionario lo sabe, por eso -y quizás hasta por menos- pero es necesario tenerlo bien protegido, cuidado y apapachado, si no lo hacemos nosotros -con nuestros impuestos y así- ¿quién lo hará? Nada más imagina, andar como tú o como yo, como nosotros, en la calle, sin guardaespaldas, cuidando que no aparezca un motoratón y nos arrebate el teléfono. Imagina no poder caminar por los rumbos de la terminal de autobuses foráneos con seguridad, ni Dios lo mande, que él camine esas calles llenas de humanos que te venden de todo o esperan una distracción para darte baje hasta con tu Casio. “N´ombre” qué oso. Nada más para el anecdotario, que mis ojitos de pollo no vean al “secre” de Seguridad mexiquense tomando otra agua que no sea Perrier. Antes de ver a mi “actorazo de mi vidaza” de Netflix, vivir en un multifamiliar, que el universo se acabe con un chasquido de dedos de Thanos. Qué importa no tengamos un plan de prevención, no importa en las cárceles mexiquenses sigan los autogobiernos, no importa la “hermandad” siga estableciendo cuotas y entres, no importa sigan asaltando a jóvenes en calles, tampoco importa se siga agrediendo en vías públicas a hombres y mujeres, nada de eso importa, como ver el desplante de seguridad que protege al titular de la Seguridad mexiquense, eso es como vivir en Dinamarca.
La rabadilla del Pollo
Pollos en el tejado me dicen, Elías Rescala Jiménez, fue abordado por vecinos de Naucalpan mientras grababa spots para su campaña como candidato a diputado local, -se la va a rifar en la calle- y mira, además en las escuelas donde estudió de muy polluelo, o en los parques donde hizo sus pininos en el béisbol, las y los naucalpenses se acercaron para darle muestras de apoyo y, sobre todo, le pidieron que los ayudara a salvar a México de la política añeja y corrupta que tanto daño le ha hecho a este municipio, donde por cierto se cuenta con una muy, pero muy importante zona industrial…Esa cercanía con la gente como que le inyectó enjundia y se le vio con mucha energía y dispuesto a caminar las calles, mejor dicho a rompérsela en los siguientes días, de esas actitudes que te contagian y bueno, los alados no vamos a campaña -en esta ocasión- pero pues como que nos dieron ganitas, nos contagió…Otros emplumados en el tejaban me comentan, por dos quincenas habrá suplentes en todos lados. ¿cuántos se quedarán más tiempo?..Aunque el INEGI diga lo contrario, por hoy, cierro pico. Shalom. Mi correo es: alfredo.albiter@capitalmedia.mx.