En la última entrega, hablamos de la “piña” que durante mucho tiempo trató de vender el ahora alcalde de Toluca, Juan Maccise Naime. Una idea de ser un hombre honesto, recto y agradecido y toda la información surgida en los últimos meses nos da cuenta, el lado oscuro de la fuerza lo conquistó y lo llevó a su querencia…Las historias sobre el comportamiento del alcalde y su “círculo rojo”, nos dejan ver una “camarilla”, en donde se revivió el año de Hidalgo y con tal de llevarse todo en el último tramo de la administración, hacen lo necesario sin rubor alguno…La versión que apuñala a quien fuera su director de Servicios Públicos, Jorge Rescala Pérez, fue promovida desde alguna oficina en la planta baja del Ayuntamiento. Con profesionalismo y rectitud, el hombre aguantó embates, misiles que pretendían dañar su imagen. “Fue despedido, echado del cargo…” y con ello abrían la puerta a la suspicacia, para completar la parte de su historia, al día siguiente de la RENUNCIA como director de Servicios Públicos, ya se hacía trabajo de bacheo y con bombo y platillo se anunciaba una gran cruzada de trabajo…Contaron sólo una parte, la que convenía a Juan Maccise Naime. Rescala Pérez, aguantó a pie firme, sin ventilar la serie de irregularidades que se vivían al interior de la administración con el tema del bacheo y menos habló sobre las histéricas formas de edil…Todo estaba preparado y “planchado” para que “el bacheo” pasara a manos de la Dirección General de Desarrollo Urbano, Ordenamiento Territorial y Obras Públicas, en manos de Patricio Adolfo Jiménez Gutiérrez y de Trinidad Alcántara Velázquez (director de Obras Públicas). ¿Cuál es el motivo? Que su amigo -El Pato- haga dinero, mucho dinero con este programa y de paso también alcancía para “Juanito”. Aquí parte de lo que dijimos; “Los tiempos están bien medidos, con materiales de mala calidad y caros, lograrán llegar al final del ciclo y que el próximo alcalde pida la garantía. El precio del trabajo en este tema se duplica o triplica y los moches son de pánico.”…Claro, no sólo en esta área se dan las irregularidades, hay que darle una hojeada al tema de los contratos de electrificación para encontrar más negocios, aunque estén menos visibles. A la larga lista de incluidos en la nómina de aviadores, debemos sumar los recursos que llegan al edil por esta vía, así los 500 mil pesos se vuelven mucho más. El aún presidente municipal optó por el camino corto al retiro, encontró en su círculo rojo a una “camarilla” dispuesta a decirle a todo que sí y de paso hacer sus propios negocios. Por cierto, también lo han engañado con los números. Entendieron ellos, nada tienen por perder y sí por ganar, sobre todo en el aspecto económico, por ello no dejaron pasar la oportunidad y se hicieron de cualquier cantidad a fin de cuentas, quien ha puesto la cara de “mosquita muerta” será el próximo vecino de Guanajuato…Por cierto, se viene una demanda que, de concretarse en el muy corto plazo, -como se tiene planeado- habrá de cimbrar a todo el palacio municipal. El tema es mucho más complejo de lo que, hasta ahora, hemos señalado, pues se involucran recursos federales en un área también muy, muy sensible. Abuso, acoso, precios “inflados”, compras irregulares y moches, son los elementos ideales para que las autoridades correspondientes den cauce a las investigaciones sobre el desvío y/o uso de recursos para cosas absurdas que en nada ayudan a solucionar la problemática que impacta en el sector mayoritario de la población…Aunque el INEGI diga lo contrario, por hoy, cierro pico. Shalom. Mi correo es: alfredo.albiter@capitalmedia.mx