La Sociedad Mexicana de Ingenieros (SMI) ve con suma preocupación que para la redacción de la Nueva Constitución de la Ciudad de México, no fueron tomados en cuenta la participación de ingenieros, arquitectos y urbanistas mexicanos.
Hoy cuentan con planes, estudios y análisis a las muchas problemáticas que tiene la capital del país, por lo que le parece un lamentable error no haberlos integrado.
Marcos Theurel Cotero, presidente del SMI, explica, en exclusiva para este medio, que nuestra gran ciudad hoy cuenta con una gran oportunidad para que realmente puedan asentarse las bases para consolidar el futuro de la Ciudad de México. Sin embargo el ingeniero civil reconoció que también no fueron integradas otras importantes especialidades, por lo qué la redacción final de este importante documento podrá ser objetado por nuestra organización de ingenieros y solicitar su revisión antes de su publicación.
Reconoce que falta dar mayor peso específico a la participación tecnológica, científica y de la ingeniería en las decisiones políticas.
Un ejemplo son las direcciones de Obras Públicas de las 16 delegaciones de la ciudad, de las cuales sólo el 40 por ciento están ocupadas por ingenieros, un 10 por ciento por otra profesión distinta y la mitad de dichos cargos, ni siquiera cuentan con una carrera.
FERNANDO FUENTES
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