Por: Eduardo Ruíz Healy
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El 17 de julio apareció en ese sitio un artículo que debe preocuparnos a todos, y más si recordamos que el actual inquilino de la Casa Blanca ya una vez amenazó con invadir México.
El artículo To Solve the Opioid Crisis, Go to War – Is it so crazy to consider using military force against Mexican drug cartels? (Para Resolver la Crisis de los Opiáceos, Vamos a la Guerra – ¿Es una locura considerar el uso de la fuerza militar contra los cárteles mexicanos de la droga?) fue escrito por Matt Mayer, un exasesor del Departamento de Seguridad Nacional (Department of Homeland Security) durante el gobierno de George W. Bush.
Meyer escribe que “Los expertos estiman que hasta 500 mil estadounidenses podrían morir por los opioides en los próximos 10 años. Casi toda la heroína y el fentanilo que golpean nuestras calles viene de México…
México también se está convirtiendo, en algunas partes del país, en el principal proveedor de metanfetamina a los Estados Unidos… Aunque el gobierno mexicano hace algunos esfuerzos para combatir a los cárteles, es rampante la corrupción dentro del gobierno… Simplemente no podemos confiar en el gobierno mexicano para realizar el tipo de acciones necesarias para aplastar a los cárteles…
Esta desafortunada realidad plantea una pregunta muy incómoda: ¿Tenemos que ir a la guerra con México para finalmente ganar la guerra contra los opiáceos y otras drogas mortales? Por ‘ir a la guerra’, me refiero a una declaración formal de guerra por el Congreso [de Estados Unidos] contra México, en la que utilizaríamos toda la fuerza de nuestro poderío militar para destruir los cárteles, los campos de adormidera y todos los elementos del narcotráfico. Idealmente, como nuestra lucha no es con el gobierno mexicano, su ejército o su gente, que tratan de debilitar a los cárteles, intentaríamos asociarnos con esas entidades contra los cárteles, así como nos asociamos con el gobierno y el ejército vietnamita del sur contra el Vietcong y el ejército vietnamita del norte”.
Dentro del gobierno de Donald Trump hay muchos que piensan igual que Mayer: que el consumo de las drogas en Estados Unidos es culpa de los mexicanos y no de los gringos que se dan vuelo usándolas cada vez más. La estupidez del autor es evidente cuando pone como un ejemplo de éxito a laGuerra de Vietnam que su país perdió frente a un enemigo mucho más débil.
A pesar de estar colmado de absurdos, el de Mayer es precisamente el tipo de texto que aparentemente le gusta leer al presidente estadounidense. Por eso debe preocuparnos. Y mucho
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Eduardo J Ruiz-Healy ruizhealy
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