En el primer día de votación sobre el aeropuerto, realizada ilegalmente, pagada por Morena, organizada por el mismo partido y con 975 boletas en cada uno de los más de 540 municipios, en la mayoría en donde quien votó no se ha subido o se subirá en un avión, en total desconocimiento del tema, de falta de información y con detalles de que hubo quienes votaron hasta seis veces en esta muestra, hoy continuará este ejercicio para muchos ya cargado a la decisión que ha tomado el presidente electo, que a su vez, manda mensajes con esto.
El primero. A la iniciativa privada, organismos financieros internacionales y nacionales y a quienes creyeron que por la importancia de la obra del que podría ser el tercer aeropuerto más grande del mundo y que podría movilizar a 70 millones de pasajeros en poco tiempo y el segundo a la población a quien al hacer la consulta con “participación ciudadana”, habría ya la disculpa de que si algo o todo sale mal, “el pueblo fue el que eligió”, lo que lo exentaría de responsabilidades.
Poco ha ayudado el que será secretario de Comunicaciones y Transportes, Jiménez Espriú que a veces sintiéndose ministerio publico, en otras procurador agrario y en otras más, prepotente siempre, el defensor de Santa Lucía e incluso presentando un estudio de la constructora favorita de AMLO, Rioboó, favoreciendo a Santa Lucía como alternativa.
Así las cosas y faltando poco más de 30 días para el 1 de diciembre, el aun presidente Enrique Peña Nieto ha señalado que los compromisos cumplidos, han sido divisa de su administración que, sin mencionarlo incluye el aeropuerto de Texcoco. No es sano que AMLO se enfrente con comunicadores y una prensa que llama “ , ya que la tendrá por el resto de sus días como presidente o expresidente.
Lo que si es un hecho es que Morena tendrá el poder por lo menos 30 años si no es que más. Hay la esperanza de que el tabasqueño al asumir la Presidencia se enfrente a una realidad que como Vicente Fox con aquello del vocho y el changarro que prometió a millones de mexicanos y que cuando Santiago Levi, le abrió por órdenes del presidente Zedillo, las cuentas de México, se convenció que no iba, como ocurrió, a cumplir sus promesas de campaña.
Veremos el domingo el resultado de la consulta y de paso, la reaparición de Elba Esther Gordillo, que como chile en comal, tronadora y brincona, ya anuncia que buscará la destitución del titular del SNTE, Juan Díaz, quien dice la profesora, lo único que tiene es la chequera, olvidando que Díaz no hizo ni leña del árbol caído y sí hizo frente a compromisos económicos de la maestra.
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