No se les ve todos los días, pero sí unas dos o tres veces por semana. Son luces que parece recorren las laderas con una velocidad asombrosa. En ocasiones van de oriente a poniente o de poniente a oriente, pero siempre bien formadas…Se observan desde lejos, como que saben nadie les hará nada y ¿cómo?, pues seguramente se trata de objetos que bajan del cielo, deben traer armas muy poderosas. Además, como quiera que sea, pues no nos hacen daño, sólo pasan y se siguen para desaparecer en una parte de la ladera…Así algunas historias que se cuentan en poblaciones cercanas al Nevado de Toluca y que, por cierto, creo firmemente se trata de una forma muy elegante de pedirnos a fuereños no meternos en cosas que no nos incumben…Esas luces que algunos suponen son la parte baja o las salpicaderas de un OVNI, no son más que vehículos recorriendo, pero con madera talada ilegalmente y no sólo del volcán mexiquense, también de Michoacán. Así se mueven los rapamontes y les es tan lucrativo que ya hicieron sus propios caminos, eso sí escondidos entre la maleza, pero muy bien trazados y lo increíble, con zonas de escape. Justo por eso a lo lejos da la impresión de que desaparecen en el infinito y más allá.
 
La rabadilla del Pollo
Pollos en el tejado me dicen que la decisión de que nadie gane más en salario que el Presidente del país, en el Estado de México es una decisión que alinea a ambas administraciones en sus planes por atender a la población, demostrando con ello, también, que la diferencia en pensamiento no evita encontrar las coincidencias…Y si a eso, me dicen los emplumados, le sumas que el mandatario mexiquense, Alfredo del Mazo Maza instruyó un presupuesto con base en prioridades netas de población y austero, pues apuntala la coordinación entre ambas entidades, y no sólo una moda de convivencia…Lo hemos dicho alado, llegará el momento de pensamientos encontrados, contrarios, así será pues, en tanto no es necesario cohabitar como si se tratara de una guerra…Cierro pico. Shalom.