La actriz Angelina Jolie, quien está por estrenar en Netflix la película First they killed my father, ha comenzando a romper el silencio luego de su sorpresiva separación (hace ya más de un año) del actor Brad Pitt, con quien vivió en pareja durante por lo menos 13 años, al reconocer que ya tiene “más canas y la piel más seca”, aunque no sabe “si eso será por la menopausia o si es sólo el año tan complicado que he tenido”.
En entrevista con la revista estadounidense Vanity Fair, la cual concedió desde su nueva mansión en Hollywood de 25 millones de dólares, Jolie asegura que tras su rompimiento con Pitt prefiere llorar en la ducha que delante de sus hijos. “No quiero que mis hijos se preocupen por mí, creo que es muy importante llorar en la ducha y no delante de ellos. Necesitan saber que todo va a ir bien, incluso cuando ni tú estás muy segura de que así sea”.
Agregó la ganadora del Oscar por la cinta Inocencia interrumpida, que “desde hace nueve meses trato de ser buena en el papel de ama de casa, recoger las cacas del perro, lavar los platos y leer historias por la noche, y he mejorado en las tres cosas”.
Angelina Jolie, de 42 años, se divorció de Brad Pitt al alegar “diferencias irreconciliables” en 2014 –a casi dos años de haberse casado–, aunque desde 2003 ya vivían juntos, luego de conocerse durante el rodaje de la película Sr. y Sra Smith.
Durante algún tiempo se especuló de alguna infidelidad de Brad Pitt, pero después personas cercanas a los actores señalaron que fueron los excesos de Pitt con la marihuana y el alcohol, los que llevaron a la pareja a la separación. Además, se ha insinuado que durante uno de estos episodios, el actor les gritó e intentó golpear a dos de los seis hijos que tiene con Jolie, tres de ellos adoptados.
“En el verano de 2016, las cosas ya iban mal… Bueno, no quiero utilizar esa palabra. Las cosas se habían vuelto complicadas”, comentó Angelina , quien rechazó que la ruptura tuviera alguna relación con el deseo de Pitt de que la familia adoptara un estilo de vida más sedentario después de años de viajar por el mundo. “Ese no era el problema. Eso fue y sigue siendo una de las grandes oportunidades que podemos ofrecer a nuestros hijos”.
“Nos recuperamos todos de los acontecimientos que llevaron al divorcio”, dice Angelina Jolie a propó- sito de sus hijos. Ante los rumores de violencia doméstica, hubo una investigación por parte del FBI y de los servicios sociales de Los Ángeles. Eximido de la investigación, hoy Brad Pitt, de 53 años, lucha por conseguir la custodia compartida de los seis hijos de la expareja: Maddox (15 años), Pax (13), Zahara (12), Shiloh (11), y los gemelos Vivienne y Knox (9).
“Nos preocupamos el uno por el otro y nos preocupamos de nuestra familia. Los dos estamos trabajando con el mismo objetivo”, dice Jolie de su relación actual con Brad Pitt.