La Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) pretende aumentar las tasas de supervivencia de los árboles reforestados en zonas con suelo degradado y árido, por lo que aplicará un dispositivo denominado “Cocoon”, que significa “Capullo” en español, un cilindro de cartón biodegradable que se usa como incubadora para árboles recién plantados.
Contiene agua para que sobreviva
En este cilindro se vierten 22 litros de agua, un hongo llamado “Mycorrhizal fungi”, y otros nutrientes para alimentar el árbol de forma independiente los primeros seis meses, y así asegurar la supervivencia de la planta sin necesidad de riego.
Con este dispositivo, el agua es transportada directamente a las raíces de la planta por medio de unas mechas de fibra y, en un promedio de tres años, el “capullo” se degrada completamente convirtiéndose en sustrato orgánico que no causa impacto en la naturaleza, ya que su interior está recubierto por una cera natural que brinda impermeabilidad y mantiene el agua durante períodos prolongados de sequía.
Está a prueba
Actualmente, “Cocoon” se prueba en la Ciudad de México, Estado de México y Michoacán. Cabe mencionar que el capullo fue creado por la empresa holandesa “Land Life Company”, está elaborado con pulpa de papel y residuos de cultivo que se degrada con el tiempo y no requiere mantenimiento ni su retiro. “Cocoon” se puede utilizar de forma masiva en reforestaciones de ecosistemas boscosos, de matorrales o semidesérticos.
Se considera que, con este método se garantiza el 90% de sobrevivencia de la planta, pues la cantidad de agua que utilizan es 50 veces menor que el sistema de riego por goteo, por lo que con esta tecnología se puede plantar cualquier día del año.
Se reforestará la zona de Texcoco
La CONAFOR realiza pruebas de “Cocoon” para reforestar mil plantas de cedro blanco y casuarina en el Lago de Texcoco, en el Estado de México, donde se construye el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, y los ensayos también se efectúan en el Nevado de Toluca.