AUTOR: MARÍA ALESANDRA PÁMANES
Las personas que no desayunan, que es de las peores prácticas para el organismo, tienen un metabolismo más lento y les faltan nutrientes que el cuerpo necesita para mantener el peso adecuado, dice Jennifer Glockner, nutrióloga de Los Ángeles. “Idealmente el desayuno, como toda comida, debe consumirse de forma lenta y mental, para que la saciedad llegue a su paso”.
Además, omitir el desayuno de forma rutinaria, dice Glockner, también provoca que se coma en exceso en las horas de comida posteriores.
Una investigación realizada por expertos del Departamento de Psicología de la Universidad de Toronto determinó que las personas que madrugan tienen una actitud positiva, sus personalidades son estables y gozan de mejor actitud y salud.
Mientras que un estudio a cargo del profesor Juan Francisco Díaz Morales, de la Universidad Complutense de Madrid, reveló que las personas matutinas tienden a ser más realistas, comprometidas y cumplen con las costumbres y tradiciones de índole social.
Por otro lado, Christoph Randler, experto de la Universidad de Harvard, dio a conocer que los madrugadores tienen mayor capacidad de prever problemas futuros y de anticiparse a los mismos. A su vez, pueden solucionarlos o minimizarlos de forma más eficiente que quienes se desvelan y se levantan tarde.
Y son más exitosas en los negocios, ya que tienen mejor estilo de vida, con hábitos saludables.
Randler dice que son proactivas, duermen mejor y otorgan momentos del día a la relajación y reflexión.
Y SON MÁS FELICES
8 Horas en promedio se recomienda que duerma la persona que madruga.
Además de que son más saludables y positivas, las personas que se levantan temprano se sienten más plenas y satisfechas con sus vidas.
Así lo indicó una investigación publicada en la revista científica Emotion, la cual destacó que
Además, quienes tienden a acostarse y despertarse temprano se sienten más alerta durante el día porque tienen bien sincronizado su reloj biológico y pueden presumir que tienen el sistema inmune más fuerte.