El país ha establecido una serie de cambios que afectan directamente a la Ley de Juegos y Sorteos en el cual se prohíbe el uso de las máquinas tragamonedas en los casinos y las salas de juego que operan en territorio mexicano.
El decreto, que se publicó el pasado 16 de noviembre de forma oficial a través del Diario Oficial, recorta el período de vigencia que tienen los permisos de juego. Hasta ahora, los casinos podían obtener todo tipo de permisos y, en ocasiones, durante un tiempo indeterminado.
Gracias a esta nueva medida, se ha fijado un espectro en el cual las licencias tendrán una duración determinada entre 1 y 15 años por las cuales podrán operar antes de tener que renovar dicha licencia.
El Gobierno de López Obrador indica que era necesaria esta regulación debido a la falta de “certidumbre jurídica” que existe en el país. Es necesario recordar que hay una estimación en la que la ludopatía afecta a alrededor de 2,5 millones de mexicanos.
Trabas especialmente para los nuevos casinos
La reforma que se ha aplicado sobre la Ley de Juegos y Sorteos indica que a los tenedores de un permiso para operar en el país no les serán revocados los derechos que han adquirido. Estas modificaciones se centran en los nuevos casinos, pero también cuando se tengan que renovar las licencias existentes. Poner trabas a los nuevos casinos parece una medida que están tomando en otros lugares del mundo, como en España.
Las máquinas tragamonedas representan el 95% de los ingresos de los casinos mexicanos, junto con los juegos en vivo, por lo que significaría liquidar a una industria que se encarga de aportar millones de dólares anuales a las arcas públicas.
Aunque son las tragamonedas las más perjudicadas, también los juegos de apuestas con ruletas y naipes se verán afectados. Actualmente se puede jugar al blackjack online casino777, de la misma forma que se puede hacer presencialmente en un casino, gracias a que cuentan con licencias para operar legalmente en el país.
Miguel Ángel Ochoa, quien es el presidente de AIEJA (Asociación de la Industria del Entretenimiento y Juegos de Apuestas), indica que para 2034 la gran mayoría de los permisos vigentes perderán su validez, lo que pondrá en riesgo a 100.000 empleos directos y 700 millones de dólares en impuestos.
Una forma de potencia el juego clandestino
En los últimos meses la policía ha dado varios golpes contra casinos ilegales y el juego clandestino. Sin embargo, la penalización a los establecimientos regulados puede llegar a ser una catapulta para plataformas que operan sin licencia y donde se puede jugar clandestinamente.
Tanto los establecimientos físicos, como las plataformas online que no cuentan con una regulación, pueden ser cobijo para quienes quieren hacer uso de los juegos de azar y las apuestas.
“Con esta reforma se perderán los ingresos millonarios que recibe el Gobierno por la importación de equipos del extranjero”, aseguraba el permisonario MegaSport en una nota. “Se incrementará el juego ilegal, que no paga impuestos y opera al margen de la ley”, refería también la empresa por escrito.
A pesar de la apuesta por la limitación y una regulación más estricta de las plataformas de juegos de azar, es posible que se produzcan cambios a futuro para afinar una regulación que sea ligeramente más laxa y permita obtener una mayor recaudación por parte de los casinos, a la par que limitan la “barra libre” que el Gobierno indica que tienen.