Orinar está prohibido en los balnearios, parece que la mayoría de bañistas mienten cuando dicen que no lo hacen en la piscina o en el jacuzzi, y una investigación así lo reveló.
Resulta que seis científicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Alberta, Canadá, recogieron muestras de 21 piscinas y ocho bañeras, 12 instalaciones recreativas, tres hoteles y una piscina privada durante un periodo de tres semanas en dos ciudades diferentes, y encontraron resultados increíbles.
Durante tres semanas midieron los niveles de orina en el agua en dos piscinas, en la primera con 420 mil litros de agua, de 20 x 10 metros y 2 metros de profundidad encontraron 30 litros de orina.
La segunda, cuyo tamaño era el doble, es decir, de 840 mil, hallaron 75 litros de orina.
El porcentaje de orina encontrado en los jacuzzis era tres veces mayor a la de las piscinas mencionadas.
Aunque la orina es una sustancia estéril y no es nocivo para la salud, algunos de sus compuestos como urea, amoníaco y creatinina, pueden reaccionar con el cloro y los desinfectantes de la piscina llegando a provocar irritación de ojos o problemas respiratorios.