Oaxaca, 7 Feb (Notimex).- Luego de recibir distintos tratamientos, cuidados y terapias, siete tortugas serán devueltas a su hábitat, después de ser afectadas por la marea roja que se presentó en aguas de la costa de Puerto Escondido en diciembre pasado.
La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), a través del Centro Mexicano de la Tortuga (CMT), que se localiza en el poblado de Mazunte, en el sur de Oaxaca, liberará a seis ejemplares de tortuga prieta (Chelonia mydas) y una golfina (Lepidochelys olivacea).
Señaló que tras ser atendidas en el CMT volverán al mar este sábado, después de que ingirieron salpas durante la presencia de marea roja en la región entre Salina Cruz y Puerto Escondido, en Oaxaca.
A finales de diciembre pasado en las costas de Oaxaca se registró el fenómeno natural conocido como marea roja, que es un aumento de microalgas en el agua, por lo que el CMT realizó la necropsia a ejemplares que fueron encontradas muertas en las playas de Huatulco.
El fenómeno no es nuevo, en febrero del 2016 se registró una situación similar en la costa oaxaqueña, por lo que el Laboratorio de Investigación en Reproducción Animal (LIRA), de la Escuela de Medicina, Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca, realizó estudios a los quelonios que se encontraron muertos.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), apuntó en enero pasado que procedió al entierro sanitario de 292 tortugas prietas y a una golfina, además rescataron a 27 tortugas vivas para rehabilitarlas en las instalaciones del CMT.
Conanp apuntó que todos los ejemplares que recibió mostraban signos de intoxicación, por lo que realizó análisis y corroboró que fue debido al fenómeno de marera roja, pero gracias al conocimiento adquirido durante más de 25 años, el personal del CMT aplicó los tratamientos.
Señaló que “debido a su debilidad e incapacidad de moverse para respirar se les colocó un chaleco salvavidas para mantenerlas a flote dentro del agua e impedir que se ahogaran. En esta etapa del tratamiento, fue crucial la labor de los trabajadores del CMT, el apoyo de voluntarios y Jóvenes Construyendo Futuro para hacer roles de vigilancia de los ejemplares en recuperación”.
Refirió que todavía permanecen con más tortugas que no serán liberadas, pues se mantendrán en observación, hasta que concluyan con la rehabilitación.
La Conanp apuntó que “las salpas son organismos de cuerpo gelatinoso y casi transparente (con frecuencia confundidos con medusas), que son movidos por las corrientes marinas; son filtradores y generalmente inofensivos, salvo que lleguen a coincidir en áreas con presencia de marea roja, que es un fenómeno que incrementa la disponibilidad de agentes tóxicos que son consumidos por las salpas”.
“Al ser consumidas las toxinas propias de la marea roja por las tortugas, les provoca parálisis del sistema motriz y con ello incapacidad para moverse y salir a respirar, causándoles la muerte por ahogamiento e intoxicación”, explicó.
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